La Asamblea General Extraordinaria de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha aprobado hoy el nuevo modelo de competición de la Copa del Rey por mayoría absoluta, con 91 votos a favor, dos en contra y una abstención.
Este nuevo modelo contempla la ampliación del número de equipos participantes, que pasaría de 83 a 116 equipos, y la disputa de todas las eliminatorias, a excepción de las semifinales, a partido único.
En la nueva Copa del Rey participarán 42 equipos de Primera y Segunda División, 28 de Segunda División B, 32 equipos de Tercera División y 4 equipos semifinalistas de la Copa Federación, además de los 10 equipos ganadores de una eliminatoria previa entre los campeones de cada federación territorial que se disputaría en el primer trimestre de la temporada.
Todas las eliminatorias, a excepción de las semifinales, serán a partido único. La final se disputará el 18 de abril de 2020.
La primera eliminatoria se disputará el 18 de diciembre y la segunda el 12 de enero. Los dieciseisavos de final, los octavos de final y los cuartos de final se celebrarán los días 22 y 29 de enero y 5 de febrero, respectivamente.
Las semifinales, a doble partido, se disputarán los días 12 de febrero y 4 de marzo de 2020 (ida y vuelta) y la final, a partido único, será el 18 de abril de 2020.
En cuanto a la Supercopa de España, la propuesta de su nuevo formato recibió 94 votos a favor, dos en contra y dos abstenciones. De este modo, su celebración pasa de ser en el mes de agosto de 2019 al de enero de 2020 y en formato de Final Four fuera de España, con las semifinales el miércoles 8 y el jueves 9 de enero, y la final para el domingo 12.
El Barcelona y el Valencia tienen ya garantizada su presencia en esta competición por su condición de finalistas de Copa, mientras que los otros dos saldrán del campeón de Liga y del subcampeón, plaza esta que actualmente tiene casi cerrada el Atlético de Madrid. Como el conjunto azulgrana es ya ganador del torneo doméstico, el puesto vacante sería para el tercer clasificado liguero, el Real Madrid.
Inicialmente, según detalló Alfredo Olivares, la primera semifinal del día 8 de enero enfrentaría al campeón de la Copa del Rey con el segundo clasificado de la Liga, y la del día 9 entre el campeón liguero y el subcampeón de Copa, un caso en el que podría coincidir el Barcelona, por lo que habrá que esperar a que termine la temporada para saber como sería definitivamente.
El presidente de la RFEF, Luis Rubiales, dejó claro que "por supuesto, se vaya donde se vaya", su organismo se encargará de los costes de viaje y estancia, y que pondrá cinco millones de euros como premios económicos, con 800.000 euros seguros para cada uno de los participantes, dos millones para el ganador y 1,4 para el subcampeón.
El lío de todos los días
Por otro lado, Rubiales acusó de "deslealtad" a LaLiga en el proceso de comercialización de los derechos audiovisuales de la Copa del Rey y de "eternizar de forma interesada" la renovación del Convenio de Competencias.
La RFEF inició su Asamblea General Extraordinaria con un vídeo explicativo de lo que es el convenio y lo ocurrido desde el inicio de la negociación hasta ahora, cuando el Consejo Superior de Deportes (CSD) actúa como mediador, y con una intervención de Rubiales en la que cuestionó las aportaciones que LaLiga asegura hacer para el fútbol modesto y su actitud ante la venta de los derechos de la Copa.
"El Real Decreto dice que LaLiga los venderá cuando se lo encomiende la RFEF. La liga nos decía 'no tenemos tiempo', en octubre, en noviembre, mientras iban vendiendo otros paquetes. Hasta cinco veces les dijimos que queríamos que lo gestionaran. Sabían que si lo vendíamos nosotros los modestos iban a ingresar menos que si lo hacían ellos para crearnos un problema", dijo.
Según el presidente, "si es la Federación quien los vende, nueve partes van para los clubes profesionales y una para los no profesionales. Si los vende la Liga entre 15 y 18 millones son para los clubes y si vendemos nosotros la cifra es de 3, 4 o 5 millones".
Rubiales señaló que hace unos días les llegó una propuesta de LaLiga que decía que querían explotarlos como comercializador. "Lo que querían era ofrecernos 15 millones y obligarnos a aceptar que ellos comercializaban la fase de ascenso de Segunda B y que la Copa siguiera igual".