Endesa ha afirmado hoy que el fallo que motivó el cero energético en Tenerife, a partir de las 13,11 horas, se produjo en instalaciones "ajenas" pero con afección a la totalidad de la generación que la compañía tenía en funcionamiento en ese momento en las centrales de producción de Granadilla y Candelaria, concretamente seis grupos en la primera, que sumaban una potencia de 253,3 megavatios (MW) y un grupo en la segunda, de 20,8 MW. 

Según detalla en un comunicado, las condiciones de red resultaban en esos momentos "incompatibles" con la generación de energía, lo que condujo a la desconexión total de toda la generación base en funcionamiento en ambas centrales de producción. 

La consecuencia inmediata fue la activación de los protocolos establecidos, que condujeron al cero eléctrico en la isla, tal y como está procedimentado. 

Así, pasados los primeros momentos del incidente y previa activación del Plan de Emergencia de Endesa, por el que la compañía realizó un primer análisis de urgencia que confirmó que "ninguna" de sus instalaciones registraba fallos o incidencias, se iniciaron las maniobras de arranque y reconexión de los grupos de producción, a fin de comenzar la reposición del suministro, siguiendo los protocolos del gestor del sistema, Red Eléctrica de España. 

Estos trabajos permitieron ir reponiendo paulatinamente el suministro hasta la recuperación total a las 22,25 horas, resalta la empresa, que disculpas a todos los clientes afectados. 

Endesa indica que estuvo en contacto a lo largo de todo el incidente con las autoridades autonómicas e insulares a fin de informar sobre la evolución de este "incidente extraordinario" y, una vez normalizado, procederá a aportar toda la información que se le demande en el marco del expediente informativo, para contribuir a "clarificar" la secuencia, evolución y medidas a adoptar para prevenir, en la medida de lo posible, circunstancias similares y poder contribuir a mejorar la capacidad de respuesta.

La REE duda del motivo del apagón

Por su parte, el director de Operación de Red Eléctrica de España (REE) en Canarias, Eduardo Prieto, ha dicho que el fallo “fortuito” del transformador de tensión en la subestación de Granadilla de Abona no debería ser suficiente para “tirar abajo” el conjunto del sistema eléctrico de Tenerife.

Por ello, continúan investigando qué otro elemento adicional estuvo involucrado, indicó en rueda de prensa, en la que ha añadido que los fallos fortuitos ocurren con relativa frecuencia.

La investigación para esclarecer las causas del apagón podría prologarse “unas semanas”, ha informado Prieto, quien sostiene que la caída del conjunto del sistema eléctrico también tiene que ver con la “debilidad inherente de estos”.

De acuerdo con Prieto, los sistemas eléctricos de Tenerife y Gran Canaria se caracterizan por ser “aislados” y “pequeños”, lo que les confiere una cualidad de “mayor vulnerabilidad” comparados con los grandes sistemas interconectados, “como los que existen en la península”.

“Cuanto más grande y más interconectado está un sistema eléctrico, más robusto es. Por lo tanto, está en mejores condiciones para hacer frente a las posibles perturbaciones sin que se produzcan consecuencias para los consumidores finales”, ha añadido.

A este respecto, Prieto ha asegurado que es “necesario” implantar medidas que permitan “evolucionar” los sistemas eléctricos desde “la perspectiva actual” hacia otra donde las energías renovables “tengan un papel predominante”.