El paro se ceba con las mujeres: 3.200 más en un trimestre

Óscar Fraile
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Valladolid se sitúa con 30.400 desempleados tras una bajada de cien personas entre los hombres de julio a septiembre y un incremento de 3.200 en las féminas. Los sindicatos exigen a las empresas de más de 250 empleados que tengan un plan de igualdad

El paro se ceba con las mujeres en el tercer trimestre

La Encuesta de la Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre del año pone de manifiesto que las mujeres han cargado sobre sus espaldas todo el peso del incremento del paro en Valladolid. La provincia cerró este periodo con 30.400 desempleados, 3.000 más que en el segundo trimestre y 5.600 más que hace un año. No obstante, existe un gran desequilibrio en cómo ha afectado este incremento a la población masculina y a la femenina. Mientras que el número de desempleadas subió en unas 3.200 para situarse en 16.200, el de parados no solo es que no subiera, sino que incluso llegó a bajar en cien personas para situarse en 14.200.

La subida del paro en Valladolid contrasta con la bajada de 5.400 personas registrada en Castilla yLeón y de 16.200 en toda España. Bien es cierto que esa cifra representa una décima parte de lo que bajó el paro en el país en el mismo periodo del año pasado.

En este periodo también se han destruido 2.600 puestos de trabajo en Valladolid, ya que el número de ocupados ha pasado de 227.400 a 224.800. Además, la tasa de paro se han incrementado del 10,7 al 11,9 por ciento, más de dos puntos por encima de la tasa de hace un año. Un indicador que también refleja la diferencia entre hombres y mujeres, ya que la tasa de paro masculina ha pasado del 10,5 al 10,3 por ciento, mientras que la femenina ha subido del 11 al 13,8 por ciento.

Los sindicatos consideran que hay razones estructurales que explican por qué las mujeres siguen sufriendo más el desempleo que los hombres y por qué en la mayoría de las localidades grandes hay muchas más paradas que parados, pese a haber cierto equilibrio poblacional por sexos. La secretaria provincial de UGT, Nuria González, explica que ellas son las que siguen accediendo de forma mayoritaria a los empleos más precarios, que suelen ser los que tienen una mayor tasa de estacionalidad. Muchos de ellos aparecen en verano y, según ella, esto puede explicar que el fin del periodo estival sea especialmente lesivo para las mujeres en materia laboral. «Hay que exigir a la Inspección de Trabajo que vigile los contratos temporales fraudulentos», señala en referencia a los que se encadenan de forma prolongada, sin que la empresa llegue a hacer indefinido al empleado. También aboga por sancionar a las empresas que tienen empleados con contratos a tiempo parcial que acaban haciendo jornadas completas, aunque esas horas extra nunca se paguen. Unos contratos con mayor presencia entre la población femenina. Además, González exige a las empresas de más de 250 trabajadores que cumplan con su obligación de desarrollar un plan de igualdad ya que, según un estudio del propio sindicato, solo el 15 por ciento lo hace.

corresponsabilidad. Por su parte, la secretaria de Mujer de CCOO en Castilla yLeón, Yolanda Martín, incide en que estos datos tienen que ver con el papel de «cuidadoras» que siguen asumiendo las mujeres en el ámbito familiar, además de ser las que asumen la mayor parte de las tareas domésticas. «Los empresarios siguen prefiriendo contratar a un hombre porque ellas son las que se encargan del cuidado de hijos y personas mayores y las que piden permisos para llevarlos al médico, para ir a las tutorías del colegio, etcétera», señala. Una situación que se suma a la «penalización» que sufren por la maternidad, que sigue siendo un factor que pesa en su contra a la hora de ser contratadas. La patronal Cecale destaca la «tendencia positiva» de los datos en la Comunidad y añade en un comunicado que «solamente con la adopción de reformas  orientadas a potenciar la competitividad de las empresas podrán mejorarse todavía más».

Los datos también revelan que hay un sector que lidera la pérdida de empleos: el industrial. Los 40.300 del segundo trimestre han pasado a ser 35.300 en el tercero, es decir, 5.000 menos, mientras que en la construcción también se perdieron otros 500 para dejar la cifra de ocupados en 13.000. Por el contrario, la agricultura registró una mínima subida de cien ocupados (9.300 en total) y el sector servicio fue el que mejor se comportó, al llegar a 167.200 ocupados, 2.800 más que en el trimestre anterior.