El Barça Lassa ganó ayer al AX Armani Exchange Olimpia Milan (85-90) en el Mediolanum Forum para darse el lujo de poder seguir soñando alto, con ser cabeza de serie en los ‘play-off’, al asaltar un feudo complicado y ante un rival directo, liderados por la defensa de Adam Hanga y el acierto de Thomas Heurtel. 

Igualado el duelo hasta el descanso, el cuadro azulgrana salió de nuevo a la pista con una marcha más, centrándose en no dar un milímetro de espacio gratis en defensa, y con un mayor acierto ofensivo para crear un ‘cocktail’ explosivo para un Milan que, pese a los 20 puntos de Mike James y Vladimir Micov, ahora pierde fuelle en la tabla. 

  La importancia de esta victoria es enorme, no solo por permitir a los blaugranas seguir soñando con estar entre los cuatro primeros, sino porque aleja al Milan, un rival directo, a dos victorias. Aire puro para unos culés que, en lo que queda, jugarán muchos más partidos en el Palau Blaugrana que fuera. 

  El Barça Lassa ganó este partido desde la defensa, a la que tanta importancia le da Svetislav Pesic. El técnico no se cansa de decir que sin defensa ningún equipo llega lejos, y en un tercer cuarto de despegue se enrocaron atrás para tomar ventaja. 

El 20-29 del penúltimo acto les hizo abrir el margen definitivo con una ventaja de ocho puntos (57-65), un colchón que sirvió para templar los nervios, ahondar en ese excelso trabajo defensivo y matar a los locales y el duelo.

Por su parte, el Real Madrid buscará hoy (21,00 horas/Mov. Dep.) en el WiZink Center su decimoquinto triunfo en una jornada en la que recibirá a un rival directo como Olympiacos, al que podría alejar del ‘Top cuatro’.