El Real Valladolid y el Leganés dan comienzo este viernes al año deportivo en el estadio José Zorrilla con un partido que puede ser relevante para ambos conjuntos en la medida en que están llamados a luchar por la permanencia al final del curso.

El equipo que dirige Sergio González retoma el pulso competitivo tras el parón navideño, con una consigna clara. "Es un choque marcado en rojo en el calendario", se señala desde el club. 

En este primer partido del año se mide a un rival que necesita puntuar para escalar posiciones y tratar de salir de la zona de descenso en la que se ha hundido. Pero que acumula tres resultados positivos en las tres últimas jornadas, justo desde que el mexicano Javier Aguirre se hiciese con el timón pepinero. 

Nacho continúa sin recuperarse de sus molestias en el tobillo y volverá a causar baja ante el Leganés, en un partido que, según el técnico, Sergio González, "puede suponer un antes y un después para el equipo". Ante esta importante ausencia, el entrenador catalán, que parece haber descartado a Fede Barba para sustituir a Nacho, podría alinear a Antoñito o Pedro Porro a pierna cambiada, recoge Efe, si bien, a priori, no se plantea realizar cambios en la estructura del equipo, a pesar de que el Leganés suele desplegar una línea de cinco defensas. En este sentido, explicó ayer que, "cuando se ha jugado con cinco en defensa, el equipo no ha respondido como se esperaba", con lo que todo apunta a que repetirá el 4.4.2 habitual para enfrentarse a un rival directo por la salvación que, con la llegada al banquillo de Javier Aguirre "ha ido a más tras hallar la clave".

En su opinión, "hay que saber atacar, y que los que atacan estén tranquilos y confíen en las acciones de sus compañeros para aportar equilibrio, porque ellos cuentan con la opción de los dos carriles, con Kevin Rodrigues entrando bien, con balones al segundo palo para Braithwaite, mientras que En-Nesyri es fuerte y busca bien las espaldas, y Óscar llega por dentro".

La motivación es máxima, sobre todo sabiendo que el estadio presentará un lleno prácticamente absoluto, tras agotarse las entradas, y por ello Sergio González confía en que ese apoyo "se note en las fases más complicadas del partido, porque las habrá, y entre todos logremos los tres puntos".

El Leganés lleva tres partidos ligueros sin conocer la derrota tras imponerse como locales al Celta de Vigo y al Espanyol y empatar en su visita al Alavés. Los puntos sumados les han permitido escapar del último puesto de la clasificación y, en caso de victoria, podrían dormir fuera de los puestos de descenso. Una labor complicada ya que aún no saben lo que es ganar a domicilio en lo que va de campaña.

Pese a ello han puntuado en dos de sus tres salidas con Javier Aguirre en el banquillo y pueden agarrarse al último precedente en tierras vallisoletanas, que se saldó con un 2-4 favorable estando el equipo también en una situación complicada.

De cara a esta cita seguirán siendo baja José Luis García del Pozo 'Recio', Unai Bustinza y Dimitrios Siovas. Los tres se ausentaron del último choque antes del parón navideño por problemas físicos de los que aún no se han recuperado.

A ellos se suma la ausencia de larga duración del extremo argentino Alexander Szymanowski y la de Fede Varela, compatriota de este que jugará cedido en Las Palmas hasta final de temporada en una operación que se ha cerrado de manera reciente.

Alineaciones probables

Real Valladolid: Masip; Moyano, Salisu, Kiko Olivas, Antoñito; Hervías, San Emeterio, Joaquín, Toni Villa; Sandro y Guardiola.

Leganés: Cuéllar; Rosales, Awaziem, Omeruo, Silva, Kevin Rodrigues; Rubén Pérez, Roque Mesa, Óscar Rodríguez; Braithwaite y En Nesyri.

Estadio: José Zorrilla.

Horario: 19.00 horas.

Árbitro: Juan Martínez Munuera (Comité valenciano).