El concejal de Planeamiento Urbanístico y Vivienda, Manuel Saravia; la concejala de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, María Sánchez; y el gerente de Aquavall, Pedro Arroyo, han visitado las obras de unos trabajos que dieron comienzo el 18 de febrero y que tenían, como fecha prevista de finalización, el 2 de agosto. 

María Sánchez ha destacado la importancia de esta obra en una zona "histórica" en la que hay agua filtrada para distribución. "Aquavall nació con la vocación de que lo que pagamos los vallisoletanos y las vallisoletanas por el precio del agua una vez municipalizada vaya a acometer mejoras en la red y una de ellas es esta", ha señalado. 

Por su parte, el gerente de Aquaval, ha señalado algunas de las actuaciones importantes de esta obra en la ETAP de San Isidro como es el refuerzo de las armaduras de las estructuras que soportan la cubierta que estaban muy deterioradas, la impermeabilización de la cubierta, entre otras. Nunca se había hecho una reparación en este depósito. "Los ciudadanos lo notarán en menores pérdidas de ejecución", ha explicado. 

La actuación llevada a cabo se circunscribe a las dos antiguas balsas de decantación de la ETAP de San Isidro que devengaron en depósitos de agua filtrada. La capacidad de los dos depósitos es de 24.000 metros cúbicos, explica el Consistorio a través de un comunicado remitido a Europa Press.