El Espanyol llegará al José Zorrilla con un equipo ‘sensiblemente’ modificado respecto al que cayó derrotado en la primera vuelta ante el Pucela. El club catalán, con su dueño al frente, el chino Chen Yansheng, ha puesto toda la carne en el asador en el mercado invernal, gastándose 40 millones en refuerzos. «No he dejado de invertir desde que llegué y voy a seguir igual para convertir al Espanyol en un referente del fútbol mundial. Dadme tiempo, por favor», llegó a decir a mediados de diciembre el máximo mandatario en la junta de accionistas del Espanyol.

Dicho y hecho. 41 millones en tres futbolistas. Es decir, seis millones más de lo máximo que puede destinar el Real Valladolid... a toda su plantilla.

El primer cambio llegó en el banquillo. Abelardo tomó el relevo de Pablo Machín que, a su vez, había sustituido a David Gallego. Es decir, van ya por su tercer entrenador en siete meses.

41 millones para una salvación - Foto: Jose Manuel Vidal.Con el asturiano ya al frente se incorporaron un delantero, un medio y un defensa, es decir, un jugador por puesto en la ventana invernal de fichajes. Por los tres, el Espanyol desembolsó dinero.

Pagó 20.5 millones de euros, más dos en variables, al Benfica por Raúl de Tomás (hasta 2026). El delantero estaba en la cartera del Pucela, aunque lejos de sus opciones reales. El exblanquivioleta ha firmado 5 goles con su nueva camiseta (4 en Liga y 1 en la Copa). Fue baja la semana pasada en Sevilla y en ésta no ha podido estar en la cita europea de su nuevo equipo. Apura para jugar en Zorrilla.

Tras atar a un hombre gol, el club barcelonés fue a por un defensa. En verano habían pagado 8 millones por Calero, aunque el de Boecillo no acababa de cuajar –acumulando 978 minutos en 14 encuentros, 11 de ellos de inicio–. Así que desembolsó otros 9 millones al Getafe por Leandro Cabrera (hasta 2024). El uruguayo aterrizó como uno de los baluartes de los madrileños y ha jugado 4 encuentros de titular.

41 millones para una salvación - Foto: Jose Manuel Vidal.Pero ahí no se quedó la cosa y unos días más tarde se hicieron con Embarba (hasta 2024), abonando otros 10 millones por él al Rayo Vallecano.

El último día hicieron otro movimiento más, también pasando por caja, pagando 1.5 millones por el portero suplente Oier.

Es decir, 41 millones para tratar de salvar la categoría. Es decir, seis millones más de lo que ha destinado el Pucela a todos sus jugadores.