Los ingleses son únicos (o muy suyos) a la hora de elaborar ‘cuadros de competición’: Wimbledon es el único torneo del planeta que sigue confeccionando los suyos sin tener en cuenta el ‘ranking’ de los tenistas. Conforme avanza esta Eurocopa, muchos aficionados cada vez tienen más claro que aquello de la 'multisede' de Platini, lo de las 11 naciones y la diversidad, tenía truco: la competición es más inglesa que de ningún otro país. «¿Mi favorita? Inglaterra». Cuando todos señalaban a Francia o a cualquier otro monstruo del Grupo F, Roberto Martínez, seleccionador belga, concedía todo el favoritismo a una selección que se quitaría al campeón del Grupo F hasta la final, no tendría que vérselas con la ‘número uno’ del mundo (Bélgica) hasta esta, y, sobre todo, jugaría seis de los siete partidos en Wembley.
Después de superar el escollo de Alemania, de que España no cumpliese en el Grupo E y de que Países Bajos pifiase ante los checos, ¿quién frenará a los ingleses?

Ucrania

En cuartos, el indescifrable bloque del mito Shevchenko tendrá la única oportunidad de medir la fuerza inglesa lejos de Wembley: Roma será la sede de un duelo inédito en la Eurocopa. Y es indescifrable porque sigue sin completar un partido ‘redondo’ (dos victorias y dos derrotas, seis goles marcados y seis encajados)… pero está entre los mejores con una idea:un 4-3-3 conservador y que la toquen los artistas:Zinchencko, Malinovski, Yarmolenko y Yaremchuk. 

Dinamarca

La única que fue claramente superior a su rival en octavos (4-0 a una Gales descosida) y, según los analistas, la gran amenaza a la final ‘cantada’ de Inglaterra en Wembley. Décima selección del mundo, ocho goles en los dos últimos partidos… y un factor imprevisto antes de la Eurocopa, el ‘espíritu de Eriksen’: su desvanecimiento en el primer encuentro ante Finlandia ha unido al equipo de una forma casi espiritual en busca del gran objetivo.

República Checa

El peso de la Historia cuenta y mucho. Una escuadra gana porque, sencillamente, suele hacerlo en un campo, en una competición… Y la relación de Checoslovaquia con la Eurocopa tiene un punto especial. Campeona en el 76, finalista en el 96, semifinalista en 2004… Silhavy ha enhebrado con mimo un equipo muy competitivo con dos de los fijos, hoy por hoy, en el once ideal del campeonato: el sevillista Tomás Vaclik en la portería y el delantero Patrik Schick (cuatro goles), que a sus 25 años va a ser uno de los nombres del mercado veraniego.