El senador, ex alcalde y portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Burgos renunciará esta semana a su acta como concejal en el Consistorio de la capital burgalesa, unas funciones que pasará asumir Carolina Blasco. De esta manera, dejará atrás más de 20 años inmerso en la política municipal de la ciudad de Burgos donde, además de otros cargos, fue alcalde entre los años 2011 y 2019, según publica en su edición de hoy Diario de Burgos.

Tras las elecciones municipales del año pasado que convirtieron al socialista Daniel de la Rosa en el nuevo alcalde de la ciudad -con el apoyo de Podemos- tras ser la lista más votada en los comicios, con once concejales, frente a los 7 del PP y 5 de Cs. El también senador por Burgos del PP presentará su renuncia en cuestión de horas y cerrará así una época en la política local burgalesa en la que ha tenido un protagonismo trascendental.

El todavía portavoz del PP en el Ayuntamiento capitalino se ofreció a renunciar a ser él el candidato de una hipotética moción de censura que se anunció el año pasado tras la victoria socialista en las elecciones municipales, pero imponía que la alcaldesa resultante fuera Carolina Blasco por tener el PP más escaños que los liberales, algo a lo que Cs se negó hasta que, a comienzos de este mismo año, llegaron a ofrecer al PP compartir la Alcaldía el tiempo que restaba de legislatura, de forma que Blasco sería alcaldesa y Marañón de ahí al final del mandato.

Lacalle dijo no y Ciudadanos viró para buscar un acuerdo con el PSOE que va camino de hacer vicealcalde a su candidato. Ahora que hay un pacto que, como mínimo, alcanza al presupuesto y habilita a De la Rosa para gobernar con una calma relativa, Lacalle hace valer su decisión de abandonar el Ayuntamiento, echando el cierre a su carrera en el Ayuntamiento de Burgos.