Ocho puentes o fines de semanas 'largos' en 2021

Óscar Fraile
-

La patronal insiste en la necesidad de trasladar los martes y jueves festivos a los lunes y viernes para reducir costes, una promesa realizada por varios gobiernos que nunca se ha llegado a materializar

Ocho posibles puentes o fines de semanas 'largos' en 2021 - Foto: El Día de Valladolid

El calendario laboral de 2021 revela que, teniendo en cuenta las fiestas de carácter nacional, regional y local, los vallisoletanos tendrán la posibilidad de disfrutar de ocho posibles puentes o fines de semanas más largos de lo habitual.

Sin ir más lejos, este 1 de enero cae en viernes, por lo que casi toda España comenzará 2021 con tres jornadas de descanso. Eso sí, para el siguiente habrá que esperar tres meses, puesto que hasta la llegada de la Semana Santa no habrá posibilidad de otro fin de semana largo. El 1 y 2 de abril, Jueves y Viernes Santo, respectivamente, anticipan un ‘macropuente’ de cuatro días. El tercer fin de semana largo llegará ese mismo mes, el día 23, con la celebración de la fiesta de Castilla y León, que cae en viernes.

Ya en mayo serán los festivos locales los que adquieran protagonismo. El pleno del Ayuntamiento de la capital celebrado el pasado 6 de octubre ya determinó que los dos que tiene la posibilidad de establecer serán los habituales. Es decir, el 13 de mayo, San Pedro Regalado, y el 8 de septiembre, la Virgen de San Lorenzo. El primero de ellos cae en jueves, de modo que los que tengan la posibilidad de colocar ese viernes alguno de los días de libre disposición que suelen reflejar las convenios, podrán disfrutar de otros cuatro días de descanso consecutivos. 

En quinto fin de semana de tres días no llegará hasta agosto. La Junta ha trasladado el día 15, la Asunción de la Virgen, al 16, que es lunes. Los otros tres que quedan son el 12 de octubre, Día de la Hispanidad, que cae en martes; el 1 de noviembre, Día de Todos los Santos, que cae en lunes y el 6 y 8 de diciembre, Día de la Constitución y de la Inmaculada Concepción, respectivamente, que caen en lunes y miércoles y que permitirán a los trabajadores que piden libre ese martes disfrutar del macropuente más largo del año.

Hay otros dos festivos que se celebran en miércoles y que, en principio, no dan la posibilidad de hacer puente. Se trata del 6 de enero, Reyes; y el 8 de septiembre, fiesta local en honor a la Virgen de San Lorenzo. 

Lo que parece claro es que, un año más, no se aprecian movimiento de festivos entre semana para colocarlos en lunes o viernes. No se trata de un tema menor, puesto que es una vieja reivindicación de la patronal, tanto a nivel nacional como local. La presidenta de la Confederación Vallisoletana de Empresarios (CVE), Ángela de Miguel, recuerda el alto coste que tiene que asumir la industria cada vez que tiene que encender toda la maquinaria, y en las semanas en las que se trabaja un lunes y se descansa un martes, debe hacerlo dos veces. De la misma opinión es el presidente de la Asociación para la Racionalización de los Horarios Españoles (Arhoe), José Luis Casero: «Consideramos que es bastante práctico desde el punto de vista operativo y empresarial, y eso incluye también a los trabajadores, unificar estos descansos en lunes o viernes, salvo las fiestas que por su singularidad o raigambre tengan que ser ese día», opina. Una tradición que está muy arraigada en la mayor parte de los festivos nacionales, por lo que Casero señala que este margen de maniobra sería más amplio en los festivos de carácter local. También recuerda la necesidad «hoy más que nunca» de ser operativos desde el punto de vista nacional. El presidente de Arhoe explica que los costes que suponen parar y arrancar las instalaciones dos veces en tan poco tiempo también afectan a los trabajadores, como parte fundamental de todas las empresas. «No deja de ser un barco en el que todos navegan y que a todos interesa que vaya bien», señala el representante de Arhoe.

La secretaria provincial de UGT, Nuria González, también se muestra favorable a esa medida porque «facilita el consumo, los días de ocio, el disfrute, la conciliación y el descanso de los trabajadores». Ahora bien, también incide en que las empresas no pueden pedir nada a cambio, porque, según ella, en algunas ocasiones se exige a los empleados después de estos cambios que trabajen más domingos seguidos de lo que les corresponde por convenio. colectivo

Por su parte, el delegado provincial de CCOO, Gonzalo Franco, asegura que estos aspectos exceden el ámbito competencial de Valladolid y deben decidirse en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva, y directamente con el Gobierno, en el marco del diálogo social.