Julio Valdeón

A QUEMARROPA

Julio Valdeón

Periodista


Memoria de los bares

10/09/2021

Reabren las barras y el ocio nocturno y yo me alegro. Antes de filosofar toca vivir. O sea, respirar, comer, esas cosas. Banalidades que molestaron cantidad a los guardianes de las costumbres. Su indignación la destripaba una mañana Fernando Savater a Rebeca Argudo y a mí: «Como en el fondo son unos señoritos, para ellos los bares son los lugares donde toman el aperitivo. Ni imaginan que puedan ser el lugar de trabajo de otras personas. Los chistes sobre lo tabernario revelan la miseria moral de unos señores que estudian la política y no entienden que los bares, y en general los pequeños negocios son la base de las ciudades. Porque esto no iba de tomar copas, sino de servirlas». Claro que eso sucedió en Madrid. Donde la presidenta de la Comunidad hacía lo posible (e imposible) para mantener vivo el diapasón económico. En otras tierras los bares acabaron en el pudridero. Muertos de risa o asco mientras la peste avanzaba. Cuando los mensajes histéricos hacían manitas con los rollos negacionistas. Pero es que además, encima, la cosa va más allá de lo crematístico. Verán. Con los bares íbamos a estrenar el mundo. Los países son banda sonora, calendario, biografía y gramola. Sirve para soñar, ligar, gritar, bailar, conspirar y, sólo de forma subsidiaria, beber. Las naciones y sus ciudadanos buscan sus lugares de cháchara, creación y culto. Sus ágoras. Sus templos. Espacios que funcionan como parachoques, trinchera y contraseña. Así para el amor como la guerra. E igual que los gringos sacan de las iglesias el gospel, los españoles hicimos de las barras nuestros confesionarios y del ocio nocturno una seña de identidad limpia de racismo. Somos los bares, los cafés, las discotecas, porque somos la Cripta del Pombo, el Teide, el Gijón, Chicote, Oliver, El Comunista, el Cock, Pachá, Joy Eslava, El Penta, La Vía Láctea… Gerardo Diego presidiendo la tertulia, Ruano con moscas en los anillos mientras pide recado de escribir, Paco Rabal fumándose un pito con Raúl del Pozo, Escohotado en Ibiza y Almodóvar, Alaska y el resto en Rock-Ola. Los echamos tanto de menos.