Alfonso González Mozo

PLAZA MAYOR

Alfonso González Mozo

Periodista


Peajes, baches y desvergüenza

22/05/2021

El otro día, cuando circulaba por el mini tramo vallisoletano de la autovía A-60 y después por la perpetua N-601, me dio por pensar en el asunto de esos peajes que llaman ‘blandos’, por aquello de que son menos caros que los otros, obviando que se impone sobre autovías ya construidas y pagadas. 
El viaje era solo hasta Medina de Rioseco. Por suerte. Porque, oigan, qué coñazo el que se padece a pesar de resolverlo en poco más de media hora; ir a León ahora mismo debe ser un auténtico horror. Hacía más de un año que no iba por esa carretera y es frustrante descubrir el traqueteo al que te somete un carril derecho sembrado de baches, cuando hablamos de que el tramo Valladolid-Villanubla solo tiene siete añitos.
Luego, una vez acaba la autovía, toca viajar al pasado sin Delorean ni nada, sin cambiar de música siquiera. Un carril por cada sentido, la travesía de La Mudarra, el radar de tramo de las curvas de los Coruñeses (que se sabe cuando empieza pero no cuando acaba), la travesía de Rioseco... Por suerte, como decía, no tuve que ir más allá. Fue más que suficiente.
Lo peor es que son demasiados los tramos de autovía de este pelaje, al menos en la recia Castilla, y, claro, te entra una mezcla de risa y mala leche cuando piensas en que algún día nos cobrarán por usarlos bajo el pretexto de que son ‘blandos’. La idea, ahora impulsada por el PSOE, ya la puso sobre la mesa el PP hace no tanto. El objetivo, por más que cada uno se busque sus excusas, coincide en ambos casos: seguir financiando los gastos del Estado a costa del españolito de a pie, sin pensar en opciones más creativas o, mejor aún, sin ni plantearse que igual hay que poner a régimen la ingente maquinaria de gasto político.
Ahora nos intentan convencer con el típico argumento de que no sé cuantos países de Europa ya pagan por el uso de las autovías, que hay que modernizarse... Milongas de acomplejados, como si no hubiera muchas otras cosas que copiar. Aquí se plantea hasta el pago en vías nacionales y mira que habría que tener desvergüenza para llegar a cobrar a un conductor por usar la N-122 o la N-601.
Y no, no vale la argumentación esa de que debemos pagar los que usamos las carreteras ni mucho menos las cantinelas ecologistas. ¿O acaso pretenden que dejemos de usar el coche y vayamos a Alicante, Santander, Cádiz o Barcelona en bici o en bus?