Julio Valdeón

A QUEMARROPA

Julio Valdeón

Periodista


Lo de León

22/02/2020

Lo de León, del reino a la minería, concitó grandes esperanzas en los columnistas. Aguardan ilusionados a que el enésimo brote cantonalista tire del paquebote mediático. A la España vacía le siguen las ciudades muertas y al grito de Greta Thunberg contra el cambio climático pues la reivindicación de la antracita y el elogio de las centrales térmicas. Otra vez pedimos uno y lo contrario. Otra vez tomamos las calles para reclamar con el laúd romántico por los viejos agravios y los nuevos duelos. De nuevo alzados contra los centralismos concéntricos. Que nos ahogan. Que nos acotan. Que nos aherrojan al anillo centrípeto. Al tiempo que condenamos que Madrid, un suponer, legisle en materia fiscal. La reivindicación centrífuga choca así con la incapacidad para asumir de qué demonios va el federalismo. Que no es sino una suerte de barra libre de todos contra todos, y que por cierto me parece bastante más justa, aunque caníbal, que la mierda asimétrica de ahora, con comunidades como el País Vasco y Navarra libres para hacer dumping. Aunque lo mejor de todo es siempre contemplar a los políticos leoneses, del PSOE a Podemos pasando por el PP, protestando contra sí mismos. Intercambiados en un baile gobierno/oposición donde todos aspiran a controlar pancarta y presupuestos, el BOE y el megáfono, barricada y poltrona. No otra cosa ha pretendido siempre el populismo. Podrán recordarlo este 8 de marzo. Con las ministras en el papel de activistas y los activistas aupados al trono de los ministerios del ramo. Sólo resta preguntarse contra quién protestan exactamente y, ya puestos, porqué demonios critican cada poco a un Donald Trump del que copian las mañanas. Arrancas con aplausos para el carbón, con las grandes reclamaciones proteccionistas, y al final aprendes a simultanear el Despacho Oval y los mítines, la tribuna del Congreso y el tuit dinamita. Cierto que lo de los políticos leoneses es la versión canija del otro. Pero para idéntica la afluencia para estar a todo y en caso de duda culpar al mundo.