El Ayuntamiento de Valladolid ha decidido renunciar a la regulación del taxi metropolitano casi dos meses después de recibir un nuevo varapalo judicial con la anulación, por segunda vez, de esta ordenanza municipal por parte del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL). Esta normativa se aprobó en febrero de 2020 y el juez la anuló tras estimar el recurso de siete taxistas. El motivo, la ausencia de algunos informes, algunos de ellos preceptivos, y la falta de participación del resto de municipios afectados. En 2019 el TSJCyL también la 'tumbó' por otros aspectos que no se ajustaban a derecho, como la limitación de un titular por licencia, entre otras cosas.

Llegados a este punto, el Área de Movilidad ha decidido no embarcarse en la elaboración de una tercera ordenanza, con los recursos que esto supone, y sin tener la garantía de volver a sufrir otro varapalo judicial cuando se apruebe y, previsiblemente, vuelva a ser recurrida. Así, el Ayuntamiento ha decidido devolver a la Junta de Castilla y León las competencias que le fueron delegadas en 2015 para regular el taxi en el área de prestación conjunta, que abarca, además de la capital, a 24 municipios del entorno: Arroyo, Laguna, Boecillo, Cabezón, Castronuevo, Cigales, Ciguñuela, La Cistérniga, Fuensaldaña, Geria, Mucientes, La Pedraja, Renedo, Robladillo, Santovenia, Simancas, Tudela, Valdestillas, Viana de Cega, Villanubla, Villanueva de Duero, Wamba, Zaratán y Aldeamayor.

El Ayuntamiento de Valladolid ya se lo ha comunicado a estas localidades, a las asociaciones de taxistas y a la propia Junta de Castilla y León, si bien en este último caso lo ha hecho en conversaciones informales. Esta devolución de competencias tendrá que ir a pleno municipal para que sea aprobada.

El concejal de Movilidad, Luis Vélez, recuerda que estas competencias fueron delegadas al Ayuntamiento de Valladolid sin presupuesto. «Cuando llegamos al Ayuntamiento, en 2015, eso ya estaba en marcha, no lo paramos, lo aceptamos y tiramos para adelante», recuerda. Pero Vélez incide en que el Ayuntamiento ha dicho «hasta aquí hemos llegado», tras las dos anulaciones del TSJCyL.

El responsable de Movilidad avanza que, a partir de ahora, el Consistorio ofrecerá la máxima colaboración a la Junta. «El que tenga las competencias, que regule, porque eso nos va a dar mayor seguridad jurídica», añade.

Cómo funciona

Hasta ahora, la ordenanza del taxi metropolitano regulaba el tránsito de estos vehículos entre los 24 municipios del área de prestación conjunta y la capital. Una de las principales ventajas de este servicio es el establecimiento de unos precios más competitivos para los clientes que realizan viajes entre estas localidades. Unas tarifas que, a día de hoy, siguen vigentes, ya que la sentencia publicada hace un par de meses todavía no es firme.

Precisamente esta es una de las quejas de algunos municipios, cuyos vecinos sufrirán las consecuencias de esta anulación. «Para los habitantes de Laguna es una faena, porque ahora tenemos un buen precio que complementa a un buen sistema de autobuses, pero cuando hay una sentencia, hay que cumplirla», señala el concejal de Servicios Urbanos del Ayuntamiento de Laguna, Avelino Álvarez.

La ordenanza aprobadas por el Ayuntamiento de Valladolid en febrero de 2020 contaba con un amplio respaldo, tanto de estos municipios como de las asociaciones mayoritarias de taxistas. Vélez considera que el recurso presentado por ese grupo de siete taxistas responden a «intereses personales que se han cruzado con el interés general». El propio presidente de Radio Taxi, Alberto Romo, lamenta que esta decisión del Ayuntamiento dilate la puesta en marcha de una nueva regulación, esta vez de la mano de la Junta, sobre la prestación de este servicio.

Vuelta al punto de partida

El alcalde de Villanubla, Félix Velasco, lamenta los «pocos» avances que se han conseguido en este tema. «Llevamos diez años con ello y seguimos en el punto de partida», dice. Pese a ello, él sigue siendo partidario de que la Junta de Castilla y León regule el taxi metropolitano cuando recupere las competencias: «No sé si será más efectiva, pero creo que debe hacerlo». Villanubla cuenta con una licencia de taxi y una sola parada, si bien este vehículo no suele estar nunca allí. Este servicio funciona «a golpe de llamada», es decir, cuando un vecino lo necesita, llama directamente al taxista del pueblo. No es habitual que se utilice este servicio para ir a la capital, ya que «la mayoría de los vecinos tiene coche» o utiliza la línea regular de autobús. La mayor parte de los servicios de este profesional están relacionados con el aeropuerto, «que ahora está bajo mínimos», finaliza Velasco.

El Ayuntamiento de Valladolid mantuvo este jueves una reunión con los 24 municipios del área de prestación conjunta para comunicarles la decisión que ha tomado, que también fue trasladada a los profesionales del taxi.