La Policía cierra sin arrestos el caso del cadáver de Vadillos

A. G. Mozo
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Los vecinos del 1 de la calle Azorín confiesan a los investigadores que fueron ellos los que encargaron la tapia en la puerta del piso en que apareció el cuerpo sin vida de Leire, pero no hay detenciones al confirmarse que la muerte «no fue violenta»

Vivienda de Vadillos que estaba tapiada y donde apareció el cadáver. - Foto: EFE

Caso cerrado. La Policía Nacional ha dado carpetazo a la investigación de la muerte de Leire, la mujer de 40 años que apareció muerta el pasado 26 de enero en un piso okupa del barrio de Vadillos cuya puerta había sido tapiada con el cadáver en el interior. Apenas un mes después del hallazgo policial en el marco de una investigación por desaparición de la fallecida, se ha dado por cerrado, al no haber indicios de criminalidad y así se le ha trasladado al juez encargado del caso, el titular de Instrucción 2.

La Brigada de Policía Judicial ha archivado esta investigación hace unos días al confirmarse que «no fue una muerte violenta» y que «no hubo participación de terceras personas», tal como ha podido confirmar El Día de Valladolid.

Los investigadores del Grupo de Homicidios de la UDEV pudieron concluir que esta okupa ya había muerto cuando se tapió el acceso a ese 3ºB del número 1 de la calle Azorín. Además, varios vecinos de este bloque acabaron confesando que fueron ellos los que se pusieron de acuerdo para encargar el muro a una empresa de albañilería, en el convencimiento de que no había nadie dentro.

El cadáver fue localizado en un tercer piso del número 1 de la calle Azorín.El cadáver fue localizado en un tercer piso del número 1 de la calle Azorín. - Foto: J. TajesAl parecer, ellos pensaban que Leire y su compañero –que ingresó en prisión en los días previos a la muerte de la mujer para cumplir una condena pendiente– habían abandonado la casa y «no querían que se volviera a okupar», según detallan fuentes del caso a El Día de Valladolid. «Llevaban varios días sin escuchar ruido, ya que la pareja de okupas debía ser escandalosa y estar a voces, les vieron llevarse cosas y decidieron encargarlo, tras comprobar que no había nadie dentro», apostillan estas fuentes, que explican que la decisión de construir esa tapia se consensuó «entre los vecinos».

Así, la Policía no ha tenido que arrestar a nadie, ya que el muro se levantó cuando la mujer ya estaba muerta y no concurre ningún tipo delictivo en su conducta, por más que, inicialmente, todos optaran por negar cualquier relación con ese muro levantado ante la puerta del 3ºB.

El cuerpo sin vida de Leire fue encontrado sobre la cama de ese piso okupa, después de más de una semana de búsqueda policial tras la denuncia presentada por la hija al no tener noticias de su madre y comunicar que ese tercer piso de Vadillos era una de las viviendas por las que solía parar.