Cinco años para los acusados de agresión sexual a un menor

D.V.
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El TSJCyL ha confirmado la sentencia de la Audiencia Provincial para los dos procesados por un delito de agresión sexual cometido contra una menor, de 17 años, ocurrido en abril de 2021

Sede del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, en Burgos. - Foto: TSJCYL

El TSJCyL ha confirmado la sentencia de la Audiencia Provincial de Valladolid que condenó a cinco años de prisión a cada uno de los dos hombres procesados por un delito de agresión sexual cometido contra una menor, de 17 años, y al pago de mil euros de indemnización por daños morales.

La resolución de la Audiencia también estableció cinco años de libertad vigilada para cada encausado, que deberán cumplir después de la pena privativa de libertad, según el fallo ahora ratificado en la sentencia del tribunal autonómico, facilitada este lunes por fuentes del TSJCyL y recogida por Efe.

Los hechos ocurrieron el 2 de abril de 2021, sobre las 20:00 horas, cuando la víctima, de 17 años en esa fecha, mantenía una relación sentimental con uno de los procesados, con el que quedó.

Los dos acusados habían concertado, previamente, encontrarse allí con la joven y dirigirse los tres en un vehículo propiedad de uno de ellos a algún lugar en el que poder beber alcohol y mantener relaciones sexuales con ella, ambos, lo que la víctima desconocía.

Los tres acordaron dirigirse en el coche a la orilla del río, donde permanecieron en el coche, primero bebiendo champagne, hasta que uno de los procesados comenzó a besar a la joven y el otro acusado pasó a compartir el asiento trasero el vehículo con ellos, de manera que la víctima quedó situada entre los dos acusados.

Los dos encausados comenzaron a realizar tocamientos a la joven, quien les dijo que pararan, que no quería seguir ni mantener sexo con ellos, ante lo que ambos hicieron caso omiso.

La joven no pudo impedir los tocamientos, a pesar de mostrar abiertamente su oposición, ya que uno de ellos ejerció fuerza sobre ella y el otro impidió que pudiera moverse libremente.

Cuando consideró que había acabado con sus propósitos de satisfacción sexual, uno de los acusados se bajó del vehículo, permaneciendo junto al mismo, y el otro continuó con los tocamientos, hasta que ella comenzó a llorar, momento en el que el primer procesado dijo al otro que parara ya y los tres se marcharon en el coche.

La víctima les dijo que les iba a denunciar, porque la habían violado, y ellos le dijeron que estuviera tranquila, que no había pasado nada porque no la habían golpeado.

La joven contó lo sucedido, por mensajería, a una amiga, quien lo relató a su madre y ésta a los padres de la afectada, quien expresó su deseo de no denunciar, pero desistió después y cambió de opinión.