El colectivo de vecinos Zona Centro de Valladolid pide al Ayuntamiento de Valladolid que adopte medidas para el control del ruido nocturno en muchas calles del casco histórico de la ciudad. Lo hacen pidiendo la convocatoria "urgente" del grupo de trabajo 'Por un ocio nocturno responsable' y plantean limitar el horario de cierre, después de haber detectado un empeoramiento de la situación a medida que se han ido relajando las restricciones que había impuesto la pandemia.
En un comunicado recogido por este periódico explican que "tras la reciente apertura de los bares de copas y bocaterías, unido al extra de las nuevas terrazas abiertas, la situación del ocio nocturno en cuanto a ruidos y disturbios callejeros en las calles de la zona centro de Valladolid se ha agravado y ha vuelto a niveles mucho más preocupantes que antes del inicio de la pandemia". "Esta situación vuelve a ocasionar serios y graves daños al vecindario afectando a algo tan básico y fundamental como es la salud y el descanso de los ciudadanos".
En ese contexto, avanzan que han solicitado a la Concejalía del Area de Salud Pública y Seguridad Ciudadana la convocatoria "urgente" de una reunión del grupo de trabajo 'Por un ocio nocturno responsable' que fue creado en 2019. "El objetivo de la reunión es evaluar la problemática nocturna existente en las calles de la zona centro de nuestra ciudad y establecer de manera inmediata medidas de control, que minimicen los efectos negativos de un ocio nocturno descontrolado".
Los vecinos integrados en este colectivo van a plantear "la restricción de los horarios de cierre para los bares musicales en aquellas zonas altamente contaminadas por el ruido de la calle y la eliminación inmediata de las terrazas de estos bares musicales que se han otorgado de manera excepcional durante la pandemia". "Se necesita implantar de una vez una normativa que asegure un ocio nocturno responsable y sostenible con la mayor urgencia posible en el centro de nuestra ciudad, un ocio nocturno que no atente con algo tan esencial como es la salud de los vecinos. Creemos que ha llegado el momento de afrontar seriamente y con la máxima responsabilidad por parte de todos los agentes institucionales y sociales, esta grave problemática que desde hace tiempo deteriora de manera implacable nuestra salud", aseveran en el comunicado de prensa, que llega acompañado de un vídeo demostrativo de la situación que sufren. "Consideramos que el impacto del ruido nocturno debe considerarse como un elemento más de contaminación ambiental y que se debe optar sin demora a un modelo de ciudad que garantice el derecho tan básico y esencial del ciudadano como es el descanso", apostillan.
APOYO A LA HOSTELERÍA
El colectivo vecinal aprovecha para reiterar su "apoyo a la hostelería en general": "Compartimos con ellos la grave situación por la que su sector, como la de otros sectores económicos, está atravesando y por eso mismo pedimos actuaciones concretas e inmediatas que permitan compaginar su actividad con la normal convivencia ciudadana".