El parón "obligado" al que se ha visto sometido el Recoletas Atlético Valladolid, tras aplazarse el anterior encuentro ante Bidasoa debido a los casos de covid de varios jugadores irundarras, le ha permitido añadir alternativas de juego para contrarrestar la ausencia de sus centrales.

Así, durante estos días se ha trabajado en esa posición con Patrianova, con Miguel Martínez y con el juvenil Pablo Herrero, quien dará minutos a los vallisoletanos y podrá ir adquiriendo experiencia, si bien su técnico, David Pisonero, es consciente de que "se le ha de exigir solo lo que le corresponde a sus 17 años".

En rueda de prensa, informa Efe, ha explicado que Jorge Serrano también podrá ir aportando algún minuto de juego, puesto que parece evolucionar mejor de sus molestias en la rodilla, lo que supondrá un plus para un Recoletas cuyo objetivo es "puntuar" en la cancha del Incarlopsa Cuenca.

Un rival que, a pesar de que no está pasando por su mejor momento, "está confeccionado para aspirar a retos superiores, ya que cuenta con una plantilla en la que solo jugadores como Pizarro o Ponciano podrían militar en cualquier equipo que juegue en Europa, quizá no en Champions, pero sí en las demás".

"Si miramos nuestra plantilla y la suya, asusta, porque además de Ponciano y Pizarro, tienen a Simonet, a Doldán o a Pozzer y, sobre todo, la llegada de Bulzamini ha supuesto una mayor capacidad anotador. A esto se añade una defensa agresiva, buena portería y rápidas transiciones", ha analizado Pisonero.

Asimismo ha destacado que Cuenca "juega un balonmano sencillo en su concepto, pero muy efectivo, ya que sabe aprovechar a su gente alta en los lanzamientos y el juego a las espaldas de sus pivotes, mientras que en defensa cuenta con muchos kilos, con lo que no va a ser fácil la pelea por la victoria".

Pisonero ha valorado la importancia de cada punto en una liga Asobal que "se sabía que iba a ser discutida, pero no que dos puntos pudieran marcar tanto en la clasificación, ya que del quinto clasificado hasta los puestos de descenso hay solo cuatro de diferencia". De ahí que el reto sea "sumar en los tres próximos partidos" y, por eso, el equipo saldrá "sin nada que especular", con los efectivos que hay, es decir, sin centrales puros, ya que Borja Méndez "no se podrá incorporar, casi seguro, ya hasta el año que viene", pero con una plantilla que siempre se entrega al máximo.