Después de un año y medio de restricciones que golpearon directamente la caja de muchos negocios, el comercio recupera el optimismo de cara a esta campaña navideña. Con todas las reservas del mundo, eso sí, porque el sector es consciente de que la progresión de la pandemia sigue marcando todas las pautas sociales, además de otras amenazas, como la huelga que han convocado los transportistas entre el 19 y el 22 de diciembre. Dos factores a los que se añade una inflación disparada que en nada favorece el consumo. Todo lo contrario.
Pero, por contra, las asociaciones de comerciantes consideran que esta campaña será buena. Tanto es así, que Avadeco espera repetir el nivel de ventas de 2019, año previo a la declaración de pandemia. Lo mismo piensan desde Fecosva. Su presidente, Jesús Herreras, opina que «hay optimismo en el sector y ganas de comprar en la gente», y confía en que la vida se vaya normalizando cada vez más «si la incidencia sigue estable, aunque ahora esté subiendo un poco».
Bien es cierto que el comercio sufre en la actualidad algunos problemas de suministro como consecuencia del colapso que sufren algunos puntos clave de la distribución, como los puertos de Estados Unidos. Pero eso no significa que se vaya a producir ningún problema de desabastecimiento. «Ojalá tuviéramos el problema de que se nos acaben todos los artículos que tenemos a la venta, pero las tiendas tienen un buen stock», explica el presidente de Avadeco, Alejandro García. Eso sí, reconoce que estos problemas afectan a materias primas que son muy importantes para el sector, como el cartón. De hecho, hay cierta escasez de artículos como bolsas, precintos, etcétera. Los industriales del Mercado del Val también están lidiando con este contratiempo.
El representante de Fecosva asegura que los problemas de suministro están siendo «generalizados» en todos los sectores, aunque tampoco cree que las tiendas se vayan a vaciar. «Los productos llegan con cuentagotas», dice. Lo ha podido comprobar en primera persona, porque, en las tres tiendas de ropa y calzado que regenta, hasta hace dos meses solo tenían el 50 por ciento del material que habían encargado. «Lo único a lo que no afecta es a los productos de cercanía, entre los que se encuentran muchos de la agroalimentación», señala.
Aperturas de festivos. Este final de año será muy intenso para el comercio. Como las restricciones de la pandemia impidieron la actividad en algún festivo de apertura permitida para los grandes centros comerciales, la Junta decidió atender la petición de la Asociación Nacional Grandes de Empresas de Distribución (Anged) para que se permitiera la apertura el domingo más próximo al Black Friday, es decir, el 28 de noviembre, próximo fin de semana. Como quiera que los cuatro domingos de diciembre ya estaban autorizados, los grandes distribuidores podrán abrir cinco fines de semana seguidos. Algo «excesivo» para Avadeco. «La gente no va a tener más capacidad de comprar por abrir más días», dice García, quien también señala que este año se han adelantado algunas compras porque algunas grandes marcas ha lanzado campañas vinculadas al Black Friday antes de que llegue ese día. Por ejemplo, El Corte Inglés, Multiópticas y Media Markt. «Está totalmente desvirtuado», finaliza García.