Plata en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, oro y dos platas en Europeos y una plata y un bronce en Mundiales, además de numerosos títulos nacionales, Laura López Valle da nombre, desde mediados de enero, a la piscina de Parquesol, uniéndose a otros referentes del deporte, como Pilar Fernández Valderrama, Miriam Blasco, Henar Alonso Pimentel, Lalo García, Benito Sanz de la Rica. Entrenadora del Fabio Nelli y de la selección española júnior, la vallisoletana enseña ahora lo que ella aprendió en la piscina.

¿A que le suena lo de referente del deporte vallisoletano?

Al final, siempre he estado vinculada a Valladolid, aunque me tuve que marchar con 16 años. Y es la ciudad que me ha visto crecer como deportista. Es verdad que notas algo en la tripa cuando lo ves. El nombre ha quedado muy bonito fuera. La verdad es que me gusta.

¿Cómo fue el día de la inauguración, rodeada de familiares, amigos...?

Tenía a todo el mundo. Los que pasan cada día conmigo en Valladolid, el Club Fabio Nelli; tuve la suerte de tener también a mis chicas de la selección, a mi familia, a mis compañeras de la selección... al final estaba todo el mundo que me representa. 

Mi madre lloró un montón, porque tuvo la sorpresa de ver una foto en la que estamos las dos y que se ha quedado colgada en el hall de la piscina. Además en el recorrido que hizo el alcalde de mi carrera deportiva, nombró a mi familia; y para todos los deportistas la familia es muy importante.

¿Comparable a Pekín?

Es distinto. Al final, ves que eso tan grande que conseguiste en su momento, que yo no he sido nunca muy consciente, te lo reconocen en un montón de sitios. Y que en mi ciudad pongan mi nombre a la piscina de Parquesol, que hoy en día es en la que se celebran todos los Campeonatos de España de sincro cuando son en Valladolid, es un reconocimiento no solo a mí si no a mi deporte. 

¿Echa de menos la piscina como deportista?

Como deportista no. Ya asumí mi rol de entrenadora y me gusta. No echo de menos pasar frío en el agua (se ríe).

¿Con qué se queda de su carrera? ¿Con la medalla olímpica?

Además de la medalla, me quedo con los primeros momentos de marcharme de casa y conseguir llegar a un primer campeonato internacional con la absoluta, en Budapest 2006. Y todo lo que me ha aportado a nivel personal y a nivel deportivo mucho más. Conocí a mucha gente que, además, sigue ahora vinculada a mi deporte y podemos seguir compartiendo experencias desde el otro lado. Y a nivel personal, el hacer un deporte tan complicado y fuera de casa te ayuda a madurar a la fuerza.

Fue una de las primeras en decir basta ante la seleccionadora Anna Tarrés. Apenas tenía 21 años, ¿qué recuerda de aquello?

No tengo un buen recuerdo. Ya de por sí fue una decisión complicada. Además la tomé un mes antes de acudir a un Mundial en el que sabíamos que teníamos muchas opciones de ser campeonas en una de las pruebas porque Rusia no se presentaba. 

Agua pasada. Cerré ese capítulo. Mi vuelta a Valladolid no fue mala porque mantenía amigos, familia... y llegué sabiendo lo que iba a hacer, enseñar a las chicas de Valladolid todo lo que había aprendido. Pero fueron días complicados.

¿Cómo es su relación ahora con Anna Tarrés?

Nos vemos en los Campeonatos de España. Sin problemas. Al final fue una decisión que tomé y eso no quita el retirarnos el saludo, ni mucho menos.

¿Cómo es ahora el ambiente en la selección? 

Veo a mis deportistas contentas cuando nos vamos de concentración. No deja de ser un mes fuera de casa, entrenando 10-11 horas diarias, pero intentamos hacer actividades distintas, paseos, cines, alguna tarde libre... buscar una música que nos guste y nos represente al grupo. Un montón de cosas que creo que hace que enganche este deporte un poco más. Creo que es un ambiente bueno. Nos consideramos que somos una familia. Es verdad que está costando que den el paso a la selección absoluta. No sé si es un problema de la sociedad, de la juventud que tiene otra mentalidad. Pasan muy contentas por la júnior y luego prefieren dedicarse a los estudios que seguir entrenando diez horas diarias.

¿Y cómo es como seleccionadora/entrenadora?

Soy exigente pero cercana. Me gusta que sepan que hay que, aunque la perfección no existe, encontrar lo mejor de cada uno, desde una exigencia necesaria, sobre todo para un deporte como el nuestro; pero que tengan la confianza de que si hay algo que ocurre en el agua o que impide ir a mejor, que no tengan miedo a dirigirse a mí, decir su opinión y ver si hace falta cambiar algo.

¿Se ve en el equipo absoluto?

Ya me lo han preguntado en otras ocasiones. De momento he pasado del infantil al júnior, y me gusta ir día a día. ¿Quién dice que no? De momento estoy centrada en la júnior, con el Europeo en agosto.

Y el Fabio Nelli, ¿sigue teniendo cantera? ¿Veremos a otra olímpica en un futuro?

Ahora mismo tenemos casi 70 niñas (este fin de semana han estado en el Campeonato de España alevín e infantil, y estarán luego en el júnior). Estamos trabajando para luchar para que alguna de nuestras chicas consigan llegar a las categorías inferiores de las selecciones y luego ojalá llegue alguna a donde llegué yo.