Anuar Tuhami ha advertido este martes que "el futuro es incierto, puesto que quedan tres partidos, y pueden suceder aún muchas cosas", pero el equipo está "con las pilas cargadas al máximo y va a ir a por todas hasta el final".

En su opinión, que recoge Efe, "los tres partidos que restan serán muy complicados para todos y, aunque el Real Valladolid no lo tiene fácil, Éibar y Almería tampoco lo van a tener, ya que sus rivales también aspiran a otras metas y van a poner las cosas lo más complicadas posibles".

Anuar está viviendo "uno de los mejores momentos" en el club blanquivioleta, puesto que cuenta con la confianza del entrenador, José Rojo Pacheta, y también con la del grupo, ya que está teniendo minutos de calidad en los que está "aportando", lo que da "mucha satisfacción", ha reconocido.

El propio técnico burgalés ha alabado, en más de una ocasión, el papel de Anuar, lo cual le llena de "orgullo" y "agradece". Al respecto, ha asegurado que siempre ha contado con la confianza de Pacheta "jugando más o menos, pero ha estado ahí constantemente y, en este caso, la respuesta ha de ser dar el máximo".

"Creo que cualquier entrenador agradece que los jugadores estén disponibles para cuando haga falta, y al cien por cien, pase lo que pase, en las buenas y en las malas, y es lo que hago siempre, ayudar como sea en cada momento", ha matizado el jugador ceutí, quien pidió la salida del club en el mercado invernal pero, finalmente, optó por quedarse ante la insistencia del entrenador.

Anuar ha aclarado que no solo es "un medio centro defensivo", sino que puede "aportar más", porque tiene "llegada, presión, defensa y ataque" y es capaz de "adaptarse a diferentes posiciones", como ha ido demostrando, lo cual "no ha sido nada fácil, sobre todo en la banda".

"Al principio cuesta adaptarse, pero por mis condiciones lo he hecho, y he tratado de aprovechar los minutos en cada una de las que me han ido dando. Es lo que hay que hacer si quieres mantenerte en la dinámica del equipo. Siento que puedo ayudar en cualquier lugar del campo y eso genera confianza", ha añadido Anuar, quien propició una gran asistencia para el gol de Weissmann ante el Éibar.

El próximo choque ante la Ponferradina será un duro reto "porque es un rival bien formado, bien plantado y rocoso, y lo va a poner difícil, ya que van a agotar todas sus armas para meterse en los playoff por el ascenso, después de haber pasado por una fase complicada".

"Nosotros también hemos tenido semanas difíciles, y fue un auténtico palo perder ante la Real Sociedad B, pero hemos recuperado la ilusión y creemos a muerte, otra vez, que podemos conseguir el objetivo, de ahí que tengamos las pilas cargadas para dar el cien por cien y ganar el sábado a la Ponferradina", ha comentado.

Respecto a si ha pensado que él fuera el autor del gol del ascenso del equipo, Anuar ha admitido que sí lo ha imaginado -igual que logró el del ascenso del Promesas de 3ª a 2ª B- pero "con que lo meta otro compañero y se logre el ascenso, seré el hombre más feliz del mundo", ha concluido.