El Banco de Alimentos de Valladolid repetirá del 19 al 28 de noviembre la Gran Recogida 'Donación en caja', una fórmula que aboga por mantener el presidente de la Fundación, Jesús Mediavilla, pues se implantó en el contexto de la pandemia pero que ha beneficiado a todos y sólo ha supuesto ventajas.

Mediavilla se ha expresado así en la presentación de la VII edición de la Gran Recogida, en la que ha estado acompañado por representantes de los supermercados La Salve, Gustavo García; Lupa, David Tapias; Carrefour Valladolid, Jesús Cuadrado; y Judith Martínez, de Alimerka.

En este marco, el presidente de la Fundación Banco de Alimentos y a su vez de la Federación de Bancos de Alimentos de Castilla y León ha explicado que la fórmula de donación en caja a la que hubo que recurrir en pandemia ha beneficiado a todos, tanto a los voluntarios de la entidad para su organización como a quienes reparto los alimentos y a las familias que los reciben.

Por ello, se ha mostrado partidario de que se quede este sistema, algo que deberá decidirse en una comisión nacional de la que forma parte como presidente de la Federación autonómica.

Mediavilla ha puesto como ejemplo el pasado año, en el que se recogieron casi 500.000 euros, una cantidad con la que se pudieron comprar dos veces y media más alimentos que los que se recogieron en 2019. Todo eso se ha gastado "con creces", ya que también se han recibido cerca de 100.000 euros de donaciones en línea.

Entre las ventajas también está el hecho de que no tengan que manipular los alimentos tantas veces, que todos cuenten con la misma fecha de consumo preferente o que se hayan "estandarizado", es decir, que todos cuentan con el mismo envase, en lugar de lo que ocurría cuando compraban los ciudadanos y lo entregaban a los voluntarios. A su vez, esto facilita el reparto, que es "más ecuánime", evita el tiempo de clasificación en el que trabajaban 30 voluntarios durante casi un mes.

MÁS ALIMENTOS

Mediavilla ha señalado que también se han introducido nuevos productos como conejos congelados, cremas de verduras o yogures que se adquieren de forma permanente al igual que los huevos. Asimismo, se han aumentado los coeficientes de los alimentos que se reparte, algunos de los cuales eran insuficientes, como en el caso de la leche, que ha pasado de cuatro a seis litros o de medio a uno en el caso del aceite.

En definitiva, "todos se han beneficiado" de este cambio, ha explicado Mediavilla, quien ha agradecido la colaboración de todos los supermercados e hipermercados que participarán en esta Gran Recogida, que han pasado de 175 a 182, la mayoría de los cuales participarán entre el 19 y el 28 de noviembre --algunos por motivos organizativos sólo hasta el 25, que era lo inicialmente previsto--.

La idea es llegar a 182 voluntarios, uno a la entrada de cada centro para repartir las octavillas con los que se promocionará esta acción en el año en el que se cumple el 25 aniversario de la Fundación Banco de Alimentos de Valladolid, ha recordado su presidente, quien ha recordado a Mariano Posadas y José María Zárate, sus antecesores ya fallecidos.

En las octavillas que se repartirán se recuerda que, por seguridad, no se recogen alimentos en tienda; se pide no olvidar hacer la donación; escoger la cantidad que se desee, que tiene que ser mayor de un euro y añadirla a la compra. A este respecto, Mediavilla ha recordado que lo donado se puede desgravar en un 80 por ciento hasta los 150 euros y en un 40 a partir de esa cuantía, para lo que sólo hay que entregar el tique de compra y facilitar los datos.

A la donación en caja de los supermercados, donde los responsables de caja recordarán a los clientes a la hora del pago la posibilidad de hacerlo, se sumará la de hacerlo online a través de la web del Banco, www.bancodealimentosdevalladolid.es.

La campaña se desarrolla bajo el lema 'Es tiempo de donar, el hambre no espera' y se podrá donar en todas las tiendas de Mercadona, Gadis, Carrefour, El Corte Inglés, Alimerka, Grupo Dia, Lidl, Lupa, Aldi, Froiz, Makro y La Salve.

Mediavilla espera que los ciudadanos vuelvan a ser solidarios porque a pesar de que es una "buena noticia" que el número de personas atendidas se ha reducido de las 17.200 desde que se presentó la pandemia a las 13.100 actuales hay "oscilaciones" y es un "valle" gracias a que han bajado los expedientes de regulación o se ha contratado a gente para campañas comerciales como el 'Black Friday'.

Sin embargo, ha advertido de que ya se habla de más dificultades, las subidas de precios, la falta de semiconductores y otros problemas que puedan llegar, tras lo que ha recordado que se advierte una cronificación de la pobreza.