Quiso y no encontró el Real Valladolid Promesas en su arranque de temporada en la Segunda RFEF. Los blanquivioletas llevaron las riendas del partido ante el CD Guijuelo, achucharon, rondaron el área rival y dispusieron de varias buenas ocasiones para marcar. Sin embargo la falta de acierto condenó a los locales y, al contrario, la efectividad premió a los salmantinos que acertaron en una de las pocas del primer acto y supieron mantener esa llama encendida hasta el final.
A pesar de no ser el mejor partido del filial, que por momentos se mostró impreciso en la fluidez del balón, lo cierto es que los de Baptista asumieron las riendas desde el inicio para buscar imponer su filosofía. Lo hicieron y empezaron a generar caudal ofensivo, culminado por Slavy que tuvo hasta tres disparos en los primeros quince minutos, dos detenidos por el portero visitante y otro cruzado en exceso tras revolverse bien en el área. El mazazo llegó en el 29' cuando Caramelo, en el primer disparo entre los tres palos, la envió al fondo de la red en una buena acción individual culminada con un chut de calidad, informa laweb del club.
Cada uno cómodo en su papel, el Pucela con balón, el Guijuelo bien plantado en defensa a la espera de robar y salir con velocidad, de nuevo los locales estuvieron más próximos al gol antes del descanso, en un intento de Fran Rivera desde la frontal que desvió un defensa y a punto estuvo de colarse, y en un balón envenenado que impactó en el larguero. Pero, al descanso, el resultado era de 0-1.
Acoso sin derribo
En la segunda mitad se vio un partido menos combinativo y de más lucha. Intentaban los salmantinos retener esos tres puntos y se empeñaban los vallisoletanos en cambiar la cara al marcador, pero el cántaro a pesar de ir mucho a la fuente no se rompió.
Salió mejor de vestuarios el Guijuelo, que apretó en esos primeros minutos para luego dejar paso al monográfico blanquivioleta. Con Garri y Lucas Rosa incisivos en el lateral, y con Cédric y Slavy en puntas, comenzaron a llegar centros laterales buscando ese remate ganador que no llegó. Por dos ocasiones la tuvo Cédric pero ni con el pie ni con la cabeza logró lo que buscaba. Slavy y Pozo, ya en el 84', protagonizaron una doble ocasión con sendos disparos consecutivos repelidos por los cuerpos de la defensa. Y en el tiempo de descuento de nuevo Slavy rozó el gol, pero su cabezazo se encontró una brillante respuesta del portero Johan.