Acra es la ciudad más importante y la capital de Ghana. Tiene casi 2,5 millones de habitantes y de allí son estrellas del balompié como Michael Essien, exjugador del Real Madrid o el Chelea; o Kwadwo Asamoah, actualmente en el Inter. Allí nació hace 20 años Mohammed Salisu, hoy central titular del Real Valladolid. Y desde allí llegaron a España los padres de Iñaki Williams, delantero referencia en el Athletic. Salisu y Williams se verán las caras este domingo por primera vez en un terreno de juego. Quizá ni hablen de sus orígenes o quizá sí. Pero por ambos pasan muchas de las opciones de sus equipos de sumar los tres puntos en el regreso de LaLiga tras el parón por los compromisos de las selecciones nacionales. 

Salisu lleva poco más de dos años en España. Desde que se incorporó a primeros de octubre de 2017 al Real Valladolid procedente de la African Talent Football Academy, que apenas llevaba ocho meses trabajando en Nsawam, a 30 kilómetros de Acra, bajo la batuta del español Fran Castaño. Él se fijó en él, lo incorporó a la Academia y luego al Real Valladolid. Vino para reforzar al Juvenil de División de Honor, aunque en febrero de 2018 ya había debutado en Segunda B con el Promesas.

De perfil zurdo, anotó su primer gol con el filial en Ferrol... de chilena. El pasado 9 de febrero debutó con el primer equipo en la Copa del Rey ante el Getafe, jugando los dos encuentros completos, dejando buenas sensaciones. Y esta temporada, pese a que la primera idea del club era buscarle una cesión para que tuviese minutos, se ha asentado por sorpresa en el once inicial de Sergio González, jugando los 8 encuentros ligueros, siendo sustituido en uno por ligeras molestias físicas.

Salisu y Williams, de Acra a San MamésSu explosión ha llamado la atención de varios clubes, tanto nacionales como extranjeros. En mayo renovó hasta 2022 con una cláusula de 12 millones. 

Este domingo tendrá enfrente a la Pantera, como se conoce a Iñaki Williams, renovado este verano hasta 2028 por el Athletic con una cláusula de 135 millones. Asentado ya como delantero titular de los vascos, ha anotado un gol esta temporada, después de hacer 13 la pasada, la que de momento es la mejor en cuanto a números en la máxima categoría.

Williams nació en Bilbao hace 25 años, aunque sus padres son de origen ghanés. Realmente, como contó su madre en el documental ‘Informe Robinson’, ella es de Liberia, pero se desplazó muy joven al vecino país -entre medias de ambos se encuentra Costa de Marfil- y de allí se sienten. María, que es como se llama su madre, y Félix, su padre, decidieron desde Acra viajar a España en busca de una vida mejor. Lo hicieron cruzando primero el desierto y luego saltando la valla de Melilla. De ahí a Málaga y desde allí a Bilbao, donde nació el hoy futbolista del Athletic, cuyo nombre viene de un párroco, amigo de la familia y padrino del delantero.

Williams se crió deportivamente hablando en Pamplona, en el barrio de la Rotxapea, jugando en el Club Natación Pamplona y el Club Deportivo Pamplona. En 2012, y gracias al acuerdo ente este último y el Athletic, llegó a Lezama. Tenía 18 años y veía así cumplido uno de sus sueños. 

El 19 de febrero de 2015 se convirtió en el primer jugador negro en marcar un gol con el Athletic en sus 117 años de historia.

«En Ghana está la ciudad de mis aitas (padres en euskera), donde está mi familia», señalaba hace unos años en el periódico Mundo Deportivo con intención de viajar allí. De hecho, lleva unos veranos preparando un viaje, junto a Óscar de Marcos, al país de sus padres.

Si no pasa nada raro, Salisu y Williams se cruzarán este domingo varias veces sobre el verde de San Mamés. El del Athletic tratará de superar al del Pucela con su velocidad y dribbling; mientras que el del Real Valladolid tratará de imponer su fortaleza física y colocación.

Dos futbolistas con un origen en la misma ciudad, Acra; con pasados complicados, presentes brillantes y futuros esperanzadores. 

Ghana juega este domingo en San Mamés.