Una de las amenazas que se cierne sobre las empresas relacionada con el coronavirus es la falta de aprovisionamiento debido a las restricciones impuestas en las fronteras por el coronavirus. Iveco está siento una de las más afectadas, al tener muchos proveedores en el norte de Italia, una de las zonas más afectadas. Así, empresa y sindicatos han acordado reducir los plazos legales de comunicación de aplicación de descansos por el expediente de regulación temporal de empleo, cuyo periodo de aplicación finaliza el 31 de marzo.

En las otras dos grandes empresas de Valladolid, Michelin y Renault, no existe, de momento, peligro de que la actividad se pare, según han confirmado ambas compañías a este periódico. Pero eso no significa que no se esté haciendo un seguimiento de cerca para evitar posibles complicaciones y tomando algunas medidas.

Por ejemplo, en Michelin se han prohibido los viajes de trabajo a países donde pueda existir un alto riesgo de contagio. Además, también se ha pedido a los empleados que eviten, en la medida de lo posible, estos desplazamientos en el ámbito privado. Otra medida que se ha tomado es suspender todas las visitas que se realizan a la fábrica. Dos veces al mes acuden alumnos de distintos centros de formación a ver estas instalaciones, aunque este mes han sido tres las visitas que se han tenido que cancelar.

Es la misma medida que se ha tomado en Renault. De momento la actividad no parará, pero sí que se han dado algunas pautas de cara a proteger la salud de los empleados. Se ha pedido que se extrema la higiene de las manos y se ha repartido gel hidroalchólico entre los trabajadores. También se han anulado viajes que pudieran resultar peligrosos, se mide con lupa cada visita a la fábrica y se evitan reuniones numerosas.