El presidente de la Diputación de Valladolid, Conrado Íscar, ha homenajeado a los alcaldes y alcaldesas y resto de corporaciones municipales, en la celebración del Día de la Provincia, por "estar en primera línea cuando hay que arremangarse" y por compartir el orgullo de ser de pueblo.
"Hoy estamos aquí para disfrutar juntos, sin distinción de colores políticos ni atribuciones ideológicas. Hoy estamos aquí para celebrar todo lo que nos une, comenzando por algo tan sencillo como que somos de pueblo. Que nacimos y nos criamos en un pueblo que marcó nuestra forma de ver y entender la vida. Algo que nos hace sentirnos parte de una historia y de unas vivencias comunes de una manera única y singular", ha ensalzado Íscar en su discurso en el Auditorio Municipal de Íscar con motivo del Día de la Provincia.
El acto, celebrado por anticipado, ya que normalmente venía desarrollándose en otoño, es el último Día de la Provincia del presente mandato, ante las elecciones municipales del próximo año, cuyo cambio de fechas deberá ser en cualquier caso analizado y corroborado por la próxima corporación provincial, ha advertido el presidente al recordar que se encuentra en la recta final del presente mandato.
Íscar ha expresado su orgullo por razones tan importantes como pertenecer a una provincia única por su historia, patrimonio, agricultura y ganadería, naturaleza, tradiciones, dinamismo económico y empresarial y por "un futuro lleno de oportunidades y un presente pleno de realidades".
Pero también ha reconocido los grandes problemas que acechan a todos como sociedad, como la pandemia que no se acaba de ir, la injusta invasión rusa de Ucrania que ha llevado a cientos de refugiados a los pueblos de la provincia, la crisis económica, las dificultades de los jóvenes para acceder al mercado laboral o la crispación, cada vez mayor, en una sociedad que, sin embargo, necesita a todos.
Al recordar los tres últimos años, sacudidos sobre todo por el coronavirus, el presidente de la Diputación ha subrayado, parafraseando a Albert Eintein, que los alcaldes y alcaldesas de la provincia han sido ejemplo de "imaginación en tiempos de crisis", a la vez que ha recordado a aquellos que hoy ya no están con nosotros y han dejado "huecos difíciles de llenar, como Faustino González", siempre innovando, siempre peleando por mejorar su Cuenca de Campos, localidad de la que fue alcalde desde las primeras elecciones municipales democráticas en 1979, hasta su fallecimiento el pasado 31 de enero.
POTENCIALIDADES TRADICIONALES
Conrado Íscar ha aprovechado el acto para reafirmar su compromiso de "promover la prosperidad de la provincia", aprovechando las potencialidades tradicionales, comenzando por la agricultura y la ganadería y su necesaria transformación en industria agroalimentaria de altísima calidad, "una industria agroalimentaria que comparte espacio con otros sectores industriales como el del automóvil, el químico o el de los bienes de equipo, una industria que aprovecha también la transferencia tecnológica y de conocimiento de nuestras dos universidades".
A este último respecto, ha recordado que la UVA, con más de ocho siglos de historia, nos abre las puertas del cielo en el proyecto de la Nasa hacia Marte en el que colabora la Diputación, y una UEMC, mucho más joven, pero con la que también colaboran a través proyectos de análisis y mejora de la accesibilidad, la sostenibilidad y el emprendimiento en las rutas turísticas de la provincia.
"Proyectos que, además de trasferir conocimiento nos ayudan a retener el talento de nuestros jóvenes mejor formados. Esos jóvenes a los que tanto necesitamos. Como necesitamos un sector servicios cada vez más potente, con el turismo a la cabeza, unificando además agroalimentación, patrimonio, comercio y gastronomía en un cóctel que nos convierte en referencia de primer nivel en turismo de interior", ha incidido.
En esa labor, Íscar tampoco se ha olvidado del trabajo realizado por los empleados públicos de la institución provincial. "Sois una ayuda imprescindible para cumplir el compromiso de garantizar y mejorar la calidad de vida de las personas, para lo que hemos incrementado en estos tres años, desde la Diputación, más de un 20% los fondos destinados a servicios sociales, especialmente a ámbitos tan importantes en nuestros pueblos como la Ayuda a Domicilio o la lucha contra la exclusión social", entre otros muchos.
De hecho, ha precisado que esa apuesta por las personas supone que las políticas sociales representan hoy más del 50% del presupuesto de la Diputación de Valladolid, es decir, que uno de cada dos euros está dedicado a políticas para las personas, a lo que ha añadido los casi 20 millones de aportación extraordinaria en los últimos tres años a los ayuntamientos, a través de actuaciones como el Plan de Choque, los diferentes Planes V, el Plan para hacer frente al sobrecoste energético o el Plan Extraordinario de Inversiones en municipios de menos de 1.000 habitantes.