Valladolid cerró el mes de julio como la quinta provincia del país donde más subió el paro. Los 26.539 desempleados actuales suponen 618 más que en junio o, lo que es lo mismo, un 2,38 por ciento más. Un incremento que, porcentualmente, solo superan Ceuta (3,59 por ciento), Albacete (2,96 por ciento), La Rioja (2,60 por ciento) y Zaragoza (2,49 por ciento). De hecho, la subida del paro en todo el país fue tan solo del 0,11 por ciento, hasta los 2.883.812 desempleados, mientras que en Castilla y León se registró una mínima bajada, del 0,18 por ciento, hasta los 117.449.

Con todo, Valladolid sigue teniendo un 20,2 por ciento de parados menos que hace un año, cuando los efectos de la crisis sanitaria eran mucho más palpables que en la actualidad. Bien es cierto que ahora hay otros negros nubarrones que se ciernes sobre la economía, como una inflación disparada como consecuencia de la invasión de Ucrania por parte de Rusia.

El paro subió el mes pasado en todos los sectores, aunque el de servicios, que es el que más importancia tiene en la economía local a nivel de empleo, capitalizó el mayor incremento, con 501 desempleados más. Por detrás, muy lejos, quedan la agricultura (+94), la industria (+69) y la construcción (+3).

Contratos

Por otro lado, en julio se firmaron 17.176 contratos de trabajo en la provincia, un 7,2 por ciento menos que en el mes anterior y un 18,1 por ciento menos que en el mismo mes del año pasado. Eso sí, en lo que va de año el porcentaje de contratos indefinidos fue del 31,4 por ciento, frente al diez por ciento que solía ser habitual antes de la aprobación de la reforma laboral.

Además, según los datos del Ministerio de Trabajo, en Valladolid actualmente cobran una prestación 13.238 persona, lo que representa casi el 50 por ciento de los desempleados.

Afiliación a la Seguridad Social

Los datos del Ministerio también revelan que los 221.548 afiliados a la Seguridad Social de julio representan una bajada de 746 respecto a junio, aunque son 2.611 más que hace un año