Cronistas de la Transición y el despertar de la Democracia

D. V.
-

El Ayuntamiento de Valladolid homenajea la labor de periodistas durante un periodo crucial para la historia de España

Algunos de los periodistas homenajeados posan al lado de responsables municipales. - Foto: Ayuntamiento de Valladolid

El Ayuntamiento de Valladolid ha aprovechado la presentación de un libro sobre la obra literaria del periodista Máximo Regidor para realizar un acto de homenaje a más de 60 periodistas que trabajaron en la prensa de la ciudad en la etapa de la Transición democrática, en este caso entre 1975 y 1992.

El Salón de Recepciones del Ayuntamiento ha sido este lunes un punto de encuentro de viejos conocidos y compañeros de los medios de comunicación que trabajaron en la ciudad en los años 70, 80 y 90 del pasado siglo y que como ha recordado el alcalde de Valladolid, Óscar Puente, sirvieron "de altavoz y emisarios" de la Casa Consistorial.

Puente ha explicado que se ha marcado la etapa a homenajear entre los años 1975 y 1992, cuando ha fijado "la desaparición de la vieja forma de hacer periodismo" en Valladolid, pues en ese año el Grupo Correo llegaba al accionariado de El Norte de Castilla y comenzaba la evolución hacia los nuevos medios.

"Todo iba a cambiar, en una vorágine con el vértigo de la cultura digital.

Todo sucedió sin remisión, sin derecho a réplica", ha señalado Óscar Puente, que ha hablado de este homenaje como un momento para "ponerse romántico, añorar la vieja redacción, el ruido de la sala de teletipos, la aparatosidad de los micrófonos o la guerra con las grabadoras Marantz o Sony".

El homenaje también suponía para el alcalde de la ciudad un acto de gratitud por la labor de estos profesionales que considera que "debería ser recordada y tenida en cuenta por el nuevo periodismo, con sus ritmos, sus grandezas, pero también sus debilidades".

Los periodistas Carmen Domínguez y Luis Miguel de Dios han tomado la palabra en representación de los más de 60 profesionales que han recibido el homenaje, algunos de ellos todavía en ejercicio activo.

A quienes no han podido acudir, como ha precisado la presentadora del homenaje, Eva Moreno, se les hará llegar el obsequio que se les ha entregado a los presentes: una nueva reproducción de la fachada de la Casa Consistorial.

Luis Miguel de Dios ha destacado que ellos "solo" cumplieron con lo que era su obligación de "trabajar e informar", al tiempo que ha defendido que "solo hay dos clases de periodismo: el bueno y el malo", por lo que se debe tratar de hacer "el bueno".

Valladolid, ciudad abierta

El que fuera director del Centro Territorial de RTVE en Castilla y León ha querido, a su vez, hacer un homenaje a la ciudad de Valladolid, pues ha recalcado que muchos de los hoy reconocidos llegaron aquí procedentes de otros puntos de la comunidad y de España.

"Nos acogió, nos enseñó muchas cosas del periodismo y de la vida", ha incidido para recalcar que la capital vallisoletana "no es una ciudad que cumpla esa fama de hosca y áspera porque es abierta y acogedora".

Por su parte, Carmen Domínguez ha explicado que aunque ella llegó a Valladolid en 1984 se siente parte de esta generación de periodistas que vivieron "el gran cambio de la profesión" en las facultades o las redacciones de medios de comunicación.

"Fue la época de los primeros 'villalares', de huelgas con nombre y apellidos, de atentados sangrientos", ha recordado.

También ha querido recordar una iniciativa que tuvieron ella y la fallecida Maribel Rodicio de incorporar a la programación de TVE una tertulia con periodistas femeninas a la que llamaron "Medios con Medias".

Los casi medio centenar de asistentes han recibido el obsequio de manos del alcalde de Valladolid y del teniente de alcalde Manuel Saravia y posteriormente han compartido un aperitivo.

Antes de ello, el coordinador del libro 'Máximo Regidor, Literatura y crítica social más allá del periodismo 1960-1996', el también periodista José Delfín del Val, cronista oficial de la ciudad vallisoletana, y que compartió años de ejercicio junto al protagonista de esta obra, ha presentado la publicación del servicio editorial del Ayuntamiento.

Regidor tiene 94 años y como ha explicado Del Val, su salud le dificulta acudir a este acto de homenaje en el que ha estado representado por su mujer, Charo, y sus dos hijas.

Una de ellas, Carolina, ha tomado la palabra y ha transmitido el "orgullo" de Máximo Regidor y ha agradecido en su nombre la iniciativa del Ayuntamiento de Valladolid, que con este recopilatorio pone el colofón a su carrera como escritor.

El periodista Máximo Regidor nació en Valladolid en 1929 es en la actualidad el último representante de toda una generación de "periodistas de raza", como ha señalado el alcalde.

En la obra se da cuenta de la intensa y prolongada en el tiempo producción literaria de Máximo Regidor, materializada en decenas de cuentos y novelas cortas disgregadas en ediciones que actualmente son "muy difíciles de localizar"; y muchas de ellas incluidas en antologías o publicaciones periódicas.

Máximo Regidor se dio a conocer como escritor con la novela 'El pan muerto', que fue galardonada con el Premio de Novela Corta del Ateneo de Valladolid en 1961 y que es una de las incluidas en la antología.

Dos relatos inéditos

También forman parte del mismo su segunda novela, 'No dejarse morir', merecedora del Premio Guipúzcoa en 1962; 'No tenemos sitio para caminar', que en 1966 obtuvo el premio 'Jauja'. Además de estos títulos, la antología que ve la luz recoge doce cuentos del autor e incluso dos relatos inéditos: 'Retablo fúnebre de Avelino Quiroga y Pepe el Coronas' y 'La muerte de Clerencia Expósito'.

Se tratan estas últimas de dos creaciones que Del Val ha enmarcado estas obras en "el realismo mágico imperante en la literatura en habla hispana a partir de la publicación de 'Cien años de soledad' de Gabriel García Márquez".

Tanto las novelas como los cuentos incluidos en la antología, conservan sus portadas originales y sus ilustraciones; en su mayoría cedidas generosamente por los herederos de Cuadrado Lomas, gran amigo y colaborador de Máximo Regidor.

El libro se ha incluido en la Colección de Autores Vallisoletanos, Serie 'Contemporáneos' del catálogo de publicaciones del Ayuntamiento de Valladolid; y se encuentra ya en librerías a disposición del público.