Valladolid tiene una de las tasas de paro más bajas del país aunque eso no evita que 26.108 vecinos estuvieran registrados en la lista de desempleados, según los últimos datos del mes de septiembre. Una radiografía sectorial refleja que siete de cada diez proceden del sector servicios, mientras que 2.082 personas sin trabajo estaban empleadas anteriormente en el sector industrial.
Un sector en el que trabajan el 20% de los trabajadores de la provincia, un porcentaje que cambiará sustancialmente con la lluvia de empleos que se anuncian con los proyectos de Switch Mobility e InoBat. En el caso del primero, la fábrica de autobuses eléctricos, las previsiones facilitadas por la propia empresa son de 2.000 puestos de trabajo directos y 5.000 indirectos, gracias a una inversión de 100 millones de euros durante los próximos 10 años.
De momento, la firma angloindia ya tiene contratados medio centenar de ingenieros que trabajan en las instalaciones de la Agencia de Innovación hasta que se construya la fábrica. El plazo para la primera fase de este proyecto es de un año desde el inicio de las obras, que han obtenido esta misma semana la licencia de obra. Posteriormente, en una segunda y tercera fase está prevista la construcción de un centro de I+D y otra línea de producción de vehículos ligeros. Será en ese momento, en un plazo de unos tres años, cuando se pueda alcanzar el volumen máximo de empleo directo y se pueda comprobar su incidencia en el indirecto. El compromiso de la empresa es apoyarse en el ecosistema empresarial y profesional de la provincia y, por extensión, de la comunidad, que ya cuenta con una amplia red de empresas auxiliares con gran experiencia en el sector de la automoción y de la energía.
La memoria que la empresa presentó a la Junta para su declaración como proyecto industrial prioritario expone que necesitan unos 400 ingenieros, aunque serán contratados por otras empresas, ya que su plan industrial establece que la gran mayoría de los empleos directos en su nueva planta de fabricación serán operadores: 800 instaladores, 480 electricistas, 160 pintores y 160 operarios con otros perfiles.
tecnologización. En el caso de la futura gigafactoría de baterías de la eslovaca InoBat las previsiones no se han oficializado, pero se habla de más de 2.100 puestos de trabajo directos, en una primera fase, para alcanzar los 4.000 cuando el proyecto esté a pleno rendimiento en 2029.
El proyecto de esta multinacional de I+D y de producción de baterías, que pretende abastecer al mercado europeo y latinoamericano con sus soluciones energéticas sostenibles, la inversión prevista es de 3.000 millones de euros. Un presupuesto que responde a la «tecnologización» necesaria de las instalaciones para fabricar sus productos. En este sentido, sus directivos destacan que Valladolid «está muy bien preparada para acoger estas instalaciones» debido a que cuenta «con una universidad y un ecosistema en torno a la industria automovilística».