Santiago González

CARTA DEL DIRECTOR

Santiago González

Director de El Día de Valladolid


La pujanza industrial despeja un poco el futuro

23/10/2022

El sector industrial siempre marca el carácter de una provincia o de cualquier otro territorio frente a otras dependencias más frágiles como el sector servicios o la agricultura. Su empleo, mucho más estable, de mayor calidad y con salarios más altos, consigue cierta ventaja competitiva y eleva la calidad de vida de los ciudadanos. Por ello precisamente la confirmación de la llegada de nuevas empresas con la creación de miles de puestos de trabajo e inversiones multimillonarias impactan y alientan el optimismo de la sociedad hacia el futuro. La situación geoestratégica de Valladolid, la trayectoria de las industrias automovilísticas ya asentadas y la paz social del mercado laboral son razones poderosas para atraer proyectos que aporten valor añadido y empleos de calidad.  
Este potencial industrial no es nuevo, pues desde hace décadas se vincula a la provincia con el sector de la automoción, tanto por la presencia de los grandes fabricantes (Renault, Michelin, Iveco…) como por una destacada industria auxiliar, que se extiende no solo por Valladolid sino que también afecta a las provincias cercanas. La llegada de Switch Mobility y, a falta de confirmación definitiva, de InoBat reforzará este sector, reducirá de forma importante el número de parados y consolidará el eje industrial Burgos - Palencia - Valladolid como tractor del desarrollo económico de la Comunidad. Por lo tanto, en estos momentos de tanta incertidumbre los anuncios de inyecciones económicas y de empleo suponen un alivio para los ciudadanos, que pueden ver un poco más despejado su futuro y el de la provincia. Aunque como siempre habrá que esperar a que todo empiece a rodar para comprobar si las distintas fases de los proyectos llegan a culminar y se alcanzan los miles de puestos directos e indirectos previstos.
Hace poco más de un mes, durante la inauguración del curso económico en Castilla y León, el máximo ejecutivo de Gestamp, Francisco Riberas, animaba a impulsar el sector industrial como motor de una transformación del modelo económico. El profundo cambio que ya se está produciendo en la automoción con la implantación del vehículo eléctrico no debe hacernos perder el liderazgo internacional, ya que España es el segundo fabricante de turismos del mundo. Valladolid ocupa un lugar preeminente en este mapa y, como parece, se está resituando de forma admirable con la atracción de empresas de autobuses eléctricos (Switch Mobility) y de baterías (InoBat). Estas importantes compañías a nivel mundial pueden servir de punta de lanza para colocar a Valladolid en el mapa mundial de la industria limpia y sostenible medioambientalmente, algo que deben apoyar las administraciones, tanto la local como la autonómica e incluso la estatal.
Sin negar la importante de todo este impulso industrial para el futuro de la provincia, también quiero reflejar la destacada participación en la economía vallisoletana del sector servicios, en especial de todo lo relacionado con el turismo, la hostelería, la gastronomía, etc. Nunca conviene poner todos los huevos en la misma cesta y, aunque el empleo industrial tiene mucho margen de mejora pues aún ronda el 17 por ciento, no hay que desdeñar el casi 75 por ciento de trabajadores que suma un sector que también sostiene gran parte del Producto Interior Bruto (PIB) provincial.
En conclusión, creo que Valladolid está de enhorabuena y, sin buscar protagonismos esteriles, hay que agradecer que las instituciones hayan sabido apartar sus diferencias políticas y aunar esfuerzos para hacer posible la llegada de nuevas empresas que pueden dar un espaldarazo definitivo a la consolidación definitiva de la provincia en el grupo de cabeza de las potencias industriales españolas. Empleo y inversión son los factores clave para el crecimiento, tanto individual como colectivo, así que habrá que seguir trabajando para ver cuanto antes hechos realidad los proyectos anunciados en las últimas semanas y meses.