Universidad de Valladolid y Unión Arroyo cedieron este fin de semana en una complicada jornada para ambos dentro del grupo I de Segunda B.

En Fuente La Mora, los porteros brillaron en un partido con muchas ocasiones y que acabó decantándose del lado de Sala Ourense (1-3). Comenzó con fuerza el Uni, que dio dos avisos en sendos disparos de Javi y David R. -el del segundo pegó en el palo-. Pero los golpes no afectaron a un Sala Ourense que disfrutó de las mejores ocasiones antes del ecuador de la primera mitad. De hecho, Rubén tuvo que intervenir para sacar un gol cantado en el segundo palo.

Tras los sustos, las fuerzas se igualaron y ambos conjuntos tuvieron sus oportunidades. Rubén, como se llaman los porteros de los dos, fue el nombre más aclamado por las intervenciones que impidieron que el marcador se moviese en la primera mitad.

La segunda siguió con el ritmo de ocasiones y comenzó con un balón al palo de los gallegos. David cogió el testigo de Rubén en la meta local y salió con eficacia para desbaratar una clara ocasión de los visitantes. Eso sí, nada pudo hacer ante el remate de Ángel en el segundo palo, que aprovechó el disparo mordido de un compañero para inaugurar el marcador (0-1) a los 24 minutos.

El gol despertó a un Uni que regresó al partido adormilado. Parra gozó de un mano a mano ante Dani, que sustituyó a Rubén, pero remató desviado. Aunque no tardó en llevarse el segundo golpe, tras una buena acción de Arturo, que finalizó entre las piernas de David (0-2).

El tanto inició un minuto de locura, ya que el Uni recortó distancias en una jugada muy protestada por los gallegos. Picolo sacó de banda, el balón tocó en Raúl y se coló entre las piernas de Dani (1-2). Así, cuando parecía que el partido se le ponía cuesta arriba, el equipo de Kike Molina demostró seguir muy vivo.

Pero los minutos pasaron y el gol no llegaba. Incluso, David evitó varios goles. El tiempo se agotaba y el Uni sacó a Javi de portero-jugador, aunque tampoco encontró la llave de esa manera y, en una salida de balón, encajó el 1-3 a falta de 26 segundos con el definitivo gol de Martín.

La derrota impidió al conjunto vallisoletano asaltar la quinta plaza, la cual se aleja un poco más. El próximo fin de semana tratará de acercarse a ella si consigue la victoria en la pista del Ribeira lucense.

Mientras que de contundente se fue calificar la derrota del Unión Arroyo en su desplazamiento a Zamora para medirse con el líder de la competición, el Atlético Benavente, con un claro 10-4 al final. El equipo arroyano logró llegar al minuto quince de encuentro con igualdad (3-3), pero los últimos cinco minutos del primer acto fueron un calvario que registró cuatro tantos para los locales, dejando el choque prácticamente resuelto en la primera mitad (7-3).

Llegaba un nuevo derbi regional en Segunda ’ y el Unión Arroyo lo afrontaba sin nada que perder y mucho que ganar, pero finalmente se imponía la lógica y el equipo se volvía de vacío de Benavente pese a estar muy vivo en la primera mitad, logrando igualar el luminoso cada vez que el Atlético Benavente se ponía por delante, anotando Virgi el 1-1, Diego el 2-2 y nuevamente Virgi el 3-3, en lo que fueron quince minutos de máxima igualdad sobre la pista, pero hasta ahí llegó el equipo, y los locales sacaron su martillo de líder para endosar un parcial de 4-0 en los últimos cinco minutos del primer periodo, que hacían casi imposible la remontada.

En la reanudación, el partido bajó su intensidad fruto del marcador, los locales manejaban el balón, y el Unión Arroyo intentaba aguantar el chaparrón sin renunciar a seguir compitiendo, llegaban el octavo y noveno gol zamorano, anotando Dani el gol de Unión en esta segunda mitad (9-4), y finalmente el líder terminaba de cerrar la goleada con su décimo tanto (10-4). 

Ahora tras esta derrota el equipo ve como los conjuntos de la zona baja han sumado esta jornada, por lo que el duelo del próximo sábado en el Antonio Garnacho a las 17.30 horas se presenta de vital importancia, donde visita el conjunto asturiano del FS Boal, al que el Unión Arroyo supera en tres puntos en la clasificación.