La Denominación de Origen Rueda está a punto de concluir la que ha calificado como una vendimia "bastante complicada y bastante diferente" a la de los últimos años y como "la más larga" de toda su andadura, ya que comenzó en la madrugada del martes 16 de agosto, "antes que en todos los históricos", y concluirá más de dos meses después, previsiblemente en la semana del 17 de octubre, con más kilos de los que hacía augurar la sequía extrema de este año.
"Es un caso un poco probablemente atípico", ha reconocido el director general del Consejo Regulador de la D.O. Rueda, Santiago Mora, que ha destacado el incremento de kilos recogidos con derecho a origen, que, según ha apuntado, superarán los 150 millones en lo que ha considerado como "la vendimia más cuantiosa" con un "importante" crecimiento respecto a la última de 122 millones.
Según ha explicado Mora para argumentar este incremento de producción, aunque parecía que la vendimia venía muy condicionada por la extremada sequía y por la falta de agua, las lluvias registradas los días 28 y 29 de septiembre en toda la zona de Rueda dejaron unos 10 ó 20 litros y favorecieron que los racimos cogieran "un poco más de peso" en su fase final.
A esto ha añadido que este año han entrado en producción nuevas hectáreas y que más de la superficie total de la Denominación de Origen Rueda cuenta con el sistema de riego por goteo, "que también ha ayudado a combatir mejor la sequía".
Desde el punto de vista sanitario la vendimia de 2022 ha sido "buenísima" por la "excelente" calidad de la uva, que no ha presentado problemas de humedades ni de hongos, los que más afectan a la calidad final. "Estamos viendo una vendimia con gran potencial desde el punto de vista cualitativo", ha aseverado el director general del C.R.D.O. que ha asegurado que, tras analizar los parámetros, los bodegueros están "muy contentos".
La previsión es iniciar a finales de mes las calificaciones de los primeros vinos de esta añada con unas "expectativas máximas" en cuanto a calidad y cantidad recogida, tras ejercicios más limitados por los excedentes de vino y unas ventas que "han ido muy bien" a lo largo de todo el año, por lo que se necesitaba más uva en las bodegas para satisfacer las demandas del mercado.