De las 25 escombreras ilegales que ha limpiado el Ayuntamiento  de Valladolid en el último año, 17 han vuelto a reutilizarse. El concejal de Salud Pública y Seguridad Ciudadana, Alberto Palomino, detalla que este es el gran problema para erradicarlas definitivamente, aunque en este tiempo se han realizado más de 700 vigilancias por parte de la Policía Municipal, muchas de ellas apoyadas por drones. Y se sigue constatando la práctica habitual de depositar irregularmente residuos y materiales de construcción o demolición de inmuebles, muros u otros elementos de edificaciones.

El Consistorio puso en marcha en mayo de 2021 un plan específico para frenarlo. Y para conocer el alcance del problema se encargó un estudio, que detectó 34 vertederos ilegales. Estas escombreras tienen un «efecto llamada, de manera que finalmente se convierten en vertederos ilegales». Y actualmente la cifra se eleva a 45 puntos de vertido.

 Esto hace que el  balance sea «mínimamente positivo» a corto plazo, pero se espera lograr mejores resultados a medio. De momento, con este plan se ha conseguido la retirada de residuos, bien por parte del Servicio de Limpieza o de los propietarios de las fincas en diferentes puntos de la capital. Aunque el problema se agrava en algunas áreas, sobre todo con grandes propietarios como el Sepe, que no responden a los requerimiento.

La Policía Municipal solo ha podido iniciar expedientes de seis denuncias porque «es muy difícil localizar a los infractores en el momento exacto que depositan los residuos». Por eso desde el área de Salud Pública y Seguridad ciudadana se pone el acento en el civismo y en la responsabilidad de quienes provocan este problema. «Los únicos responsables de esta situación son aquellas personas, que de manera incívica realizan vertidos ilegales en caminos o fincas que no son de su propiedad, generando un problema estético, medio ambiental y en ocasiones de salud pública, conductas sancionables, que además generan un gasto a las arcas municipales y responsabilidades a los propietarios de las fincas donde se depositan dichos vertidos»,  reitera Palomino.

«Los únicos responsables de esta situación son aquellas personas, que de manera incívica realizan vertidos ilegales en caminos o fincas que no son de su propiedad, generando un problema estético, medio ambiental y en ocasiones de salud pública»

«Los únicos responsables de esta situación son aquellas personas, que de manera incívica realizan vertidos ilegales en caminos o fincas que no son de su propiedad, generando un problema estético, medio ambiental y en ocasiones de salud pública, conductas sancionables, que además generan un gasto a las arcas municipales y responsabilidades a los propietarios de las fincas donde se depositan dichos vertidos»

Sin embargo, el Consistorio ha alertado que la limpieza continuada «no es una solución», sino que debe abordarse de manera «integral», con una planificación de actuaciones a «corto, medio y largo plazo que implican a varios actores (propietarios particulares, sociedades propietarias y administraciones)». Por eso se está elaborando una campaña que se dirigirá a la Cámara de Contratistas por su relación con empresas que realizan obras menores, pero también a los comercios que venden productos de construcción, para informar sobre las posibilidades y obligaciones en la gestión de estos residuos. También se recordará a los ciudadanos que en los puntos limpios se pueden depositar este tipo de residuos.