La contratación indefinida alcanzó en abril registros nunca vistos en Valladolid tras finalizar el 31 de marzo el periodo transitorio para la entrada en vigor de la nueva reforma laboral, que, precisamente, buscaba este efecto en el mercado. De los 13.232 contratos firmados en este mes, un 39,7 por ciento fueron indefinidos, un porcentaje que está muy por encima del diez por ciento que era habitual antes de este cambio legislativo. Este incremento ha sido progresivo desde que en el primer trimestre del año se concediera un periodo transitorio para que las empresas pudieran adaptarse a la nueva norma. Así, en enero la contratación indefinida fue del 14,2 por ciento; en febrero, del 21,8 por ciento; en marzo, del 29,7 por ciento; y el mes pasado ya llegó casi al 40 por ciento.

Además, el número de parados bajó en abril un 1,72 por ciento para situar el número de desempleados en 27.983. Se trata de un descenso que está por debajo del registrado a nivel regional (-2,22 por ciento) y nacional (-2,77 por ciento). El sector servicios y, en menor medida, la industria, fueron los motores de esta evolución. El primero, impulsado por la Semana Santa, cerró abril con 384 desempleados menos, y el segundo lo hizo con 105 menos. La caída fue mínima en la agricultura, con ocho parados menos, mientras que en la construcción se registró una subida también muy ligera: seis parados más.

Por otro lado, actualmente hay 12.983 parados en Valladolid que cobran una prestación contributiva, con una cuantía media de 871 euros, diez menos que la media nacional. Esto deja fuera de estas ayudas a algo más del 53 por ciento de los parados.

En lo que se refiere a los afiliados a la Seguridad Social, la media en Valladolid en abril fue de 219.004, un 0,19 por ciento más que en el mes anterior y un 2,64 por ciento más que hace un año.