La Semana Santa 2021 pende de un hilo. A diferencia de otras, como la de Sevilla donde el Arzobispado ya decidió suspender las salidas procesionales, en Valladolid por el momento no hay comunicación oficial y las cofradías, al menos algunas de las más representativas, se niegan a dar ya por suspendida, por completo y por segundo año, su semana de pasión.
Esta misma semana, las seis que componen el Grupo I de la Comisión Permanente de la Junta de Cofradías solicitaron por escrito, y lograron su objetivo, una reunión urgente para decidir sobre la Semana Santa 2021. Se trata de las seis con más antigüedad, la Cofradía Penitencial de la Santa Vera Cruz, la Cofradía Penitencial de la Sagrada Pasión de Cristo, la Ilustre Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de las Angustias, la Cofradía de la Orden Franciscana Seglar, la Muy Ilustre Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad y la Insigne Cofradía Penitencial de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Tras dos aplazamientos del Pleno, su idea era obtener «información sobre las reuniones mantenidas, la situación actual y las actuaciones a tomar sobre las salidas procesionales, actos y otras alternativas a la Semana Santa 2021».
«Nosotros abogamos por la seguridad y la responsabilidad, pero no descartamos nada», señala Miguel Romón, hermano ministro de la Cofradía de la Orden Seglar La Santa Cruz Desnuda, consciente de que todo dependerá de la situación y de las autoridades sanitarias: «¿Procesiones? Ojalá podamos pero no abogamos por ellas por cachavas». Eso sí, cree que ya es tarde para un plan b y pronto para saber qué se podrá hacer: «Hay que agudizar el ingenio para estar presente. Ojalá podamos hacer algo en Valladolid».
Alejandro Carrión, secretario de las Angustias, apuesta también por plantear «alternativas viables y seguras para que haya actividades en Semana Santa», porque cree que es de importancia vital para los ciudadanos: «El problema es que no sabemos cómo vamos a estar dentro de un mes y medio, pero hay que ver qué se puede hacer y qué podemos ofrecer nosotros».
Más claro es Daniel Domínguez, alcalde de la cofradía de la Vera Cruz: «Nuestra obligación es tratar de salir. Porque desde nuestra fundación tenemos la obligación de mostrar nuestra fe en la calle, nuestra labor es evangelizadora, salir a la calle. Pero siempre acatando lo que digan las autoridades civiles, desde el punto de vista sanitario y de orden público. Pero queremos hablar para salir con medidas de seguridad». Recuerda otros eventos, como el Tour o la Vuelta, que se han podido celebrar: «Acataremos lo que se nos diga. Pero queremos que se nos diga qué se puede hacer, que no... Por eso se pidió el Pleno para tener planes». Domínguez recuerda que quien decide es el Pleno y las cofradías, no los que ocupan los puestos directivos.