La ola de calor continúa su avance en Valladolid, escalando poco a poco hacia esa barrera de los 40 grados a la que, en teoría, se llegará a partir del miércoles para, teóricamente, batir el récord histórico de la provincia, establecido en los 40,2 grados del 19 de julio de 1995.

Si el domingo el mercurio ya alcanzaba los 37, el lunes se han rozado los 39, después de que el pico se situase en los 38,7 grados de las cinco de la tarde; esta es, por ahora, la temperatura más alta de 2022 y la más elevada desde que el 13 de agosto de 2021 se llegase a 39,5. La de ayer fue una jornada en alerta amarilla por altas temperaturas, igual que lo será la de este martes, a pesar de que, inicialmente, la Aemet había establecido la alerta naranja ya desde hoy. Este aviso se mantiene para el miércoles y se extiende hasta el jueves, cuando, supuestamente, ya se superarán los 40.

Pero la escalada de los termómetros no solo afecta a las máximas del día, sino también a las mínimas, lo que provoca que las noches vayan siendo cada vez más tropicales. En la madrugada del lunes al martes, por ejemplo, el mercurio no ha bajado de 20 grados (la mínima ha sido de 20,4 a las 7.30 horas), que es lo que se espera también para las próximas jornadas, ya que la actual previsión de la Agencia Estatal de Meteorología habla de máximas que podrían llegar a los 42 el fin de semana (ya no son los 44 que se pronosticaban este lunes), con mínimas de hasta 25.