Luis Argüello se convertirá oficialmente en arzobispo de Valladolid el próximo 30 de julio en una eucaristía que se celebrará en la Catedral. El religioso tomará el relevo de Ricardo Blázquez, que a partir de este jueves pasa a ser administrador apostólico y el 30 de julio será arzobispo emérito.
Argüello también anunció que renunciará a la Secretaria General de la Conferencia Episcopal Española, así como a la Portavocía, lo que le obligará a reducir sus viajes a Madrid. Según él, uno de los retos más importantes que tiene por delante es la transmisión de la fe, así como el servicio religioso a las zonas rurales.
Por su parte, Blázquez dio la enhorabuena a Argüello y reconoció que, de no haber tenido buena salud, habría solicitado el relevo antes. También ofreció su ayuda a Argüello en el ejercicio de su Ministerio, aunque anunció que trasladará su residencia a Ávila.