La Guardia Civil ha imputado sendos delitos contra la seguridad vial a un padre y su hijo, después de que una patrulla les sorprendiese en Zaratán tras la comisión de una infracción y descubriese que el conductor era menor de edad.
La investigación llevada por agentes del Subsector de Tráfico ha servido para comprobar que el joven carecía de carné de conducir al tener aún 17 años (este 2020 cumplirá los 18, según detallan fuentes del caso), así como que el padre estaba siendo cooperador necesario del delito, al ir en el asiento de copiloto y permitir que su hijo fuese al volante a sabiendas de que no tenía carné y era menor de edad.
"El ejercicio de la actividad de conducción sin permiso atenta contra la seguridad vial y está penada por la ley con penas de prisión, multa o trabajos en beneficio de la comunidad", recuerdan desde la Comandancia de Valladolid. Por ello, el equipo de Atestados remitió ambos expedientes al juzgado de guardia, ya que ambos habían incurrido en sendos delitos contra la seguridad vial.