Hace unos pocos días, aprovechado la tramitación del Plan de Calidad del Aire, el señor Oscar Puente ha presentado una Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que impedirá el tráfico normal en Valladolid, una ZBE que DUPLICA en tamaño a la que llevaban más de un año intentando vender a la opinión pública: sus restricciones al vehículo particular incluyen todo el Centro de la ciudad, y llegarán hasta el Paseo de Farnesio (Delicias), a la calle de la Vía más allá de la Plaza Circular, Rondilla de Santa Teresa y saltarán al otro lado del Pisuerga, hasta la avenida de Salamanca. Un total de 3,1 km2 y más de 60.000 personas directamente afectadas (e indirectamente, el resto de la ciudad y localidades de la provincia).
Este experimento ideológico, (basado en su Agenda Urbana 2030), esta injusta restricción de la movilidad de los ciudadanos la pretenden justificar con un FALSO problema de contaminación que Valladolid NO tiene, sin haber presentado un inventario de emisiones contaminantes, y sin haber hecho una evaluación del brutal impacto económico que va a suponer. Porque, además, esa 'mega-ZBE' que quiere imponer el alcalde socialista va a asfixiar a nuestra ciudad, pero por el contrario, tendrá un muy leve impacto en la reducción de emisiones: según sus propios cálculos, con todas estas prohibiciones de tráfico, solo se conseguirá reducir las emisiones en toda la ciudad un ridículo tres por ciento en CO2, un ridículo 4,4 por ciento en NOx y un ridículo 5,3 por ciento en partículas.
Así que, ante este disparate, desde el Grupo Municipal VOX nos hemos visto obligados a plantear en el Pleno del Ayuntamiento nuestra ALTERNATIVA, para que todos los vallisoletanos sepan que se puede cumplir la Ley, pero con otra ZBE que no hipoteque el futuro de la ciudad. Y así, nuestra propuesta es crear una 'mínima-ZBE' de tan solo 0,34 km2 (la décima parte de la propuesta del alcalde), quecomprende zonas mayoritariamente YA PEATONALIZADAS, como son las comprendidas dentro de las calles María de Molina, San Lorenzo, San Benito, López Gómez, Plaza España y Miguel Iscar. Además, se permitirá el normal tráfico de vehículos en los ejes Poniente-Cebadería-Fray Luis de León, y en Duque de la Victoria y Bajada de la Libertad.
Ésta, es la 'mini-ZBE' que necesita el Valladolid del futuro, sin RESTRICCIONES, y sin impactos negativos, ni en el tráfico, ni económicos.
Porque el único problema de contaminación que tiene Valladolid son las tóxicas políticas de movilidad de Óscar Puente y su equipo.