El centro tecnológico Cartif, situado en el Parque Tecnológico de Boecillo (Valladolid), prevé mejorar este año los 12,3 millones de euros de retorno económico de 2022, que fue el mejor año desde su creación hace 29 años. Además, alcanzó a finales del pasado ejercicio una plantilla de 188 investigadores, una cifra que ya han rebasado hasta llegar a los 215 en el primer trimestre, pero que además estiman podría seguir creciendo.

Este martes, el director general, José Ramón Perán, y el subdirector general de Cartif, Sergio Sanz, expusieron los resultados e hitos del 2022 que recoge la Memoria Anual. También asistieron tres directivos de división: Fernando Gayubo (Sistemas Industriales y Digitales), Alberto Moral (Agroalimentación y Procesos) y Ali Vasallo (Energía).

Este centro tecnológico, el primero de Castilla y León y el sexto nacional, consiguió la "mejor" cifra de ingresos, contratación e impacto en la Comunidad en 2022, cuando registraron los 12,3 millones de facturación, de los que 8,6 millones procedieron de programas competitivos y 3,7 millones de contratos privados por su servicios tecnológico. Además, se gestionaron 140 proyectos y la financiación privada prácticamente se duplicó.

En concreto, la contratación de actividades, que determina el trabajo de los dos o tres próximos años, pasó de 14,5 millones en 2021 a a 22 millones el pasado año. Esto se concreta en 28 proyectos de la Unión Europea a través del Programa Marco Horizonte, uno con el Ministerio de Ciencia, un par de ellos con la Junta y 125 con empresas privadas. Todo ello, dijo, logra atraer recursos que en 2022 supuso 25,93 millones para actividades I+D.

El centro prevé transformar sus estructuras para adaptarse a los nuevos tiempos dentro del plan estratégico. De esta forma renombrará tres que pasarán a ser las de: Industria y Transformación Digital, Bioeconomía y Medioambiente y Transición Energética. A ellas se unirá la de Bienestar y Salud debido al reconocimiento que aseguraron le ha dado la Junta para la mejora de la planificación y desarrollo de proyectos de habilitadores digitales para mejorar los procesos socio-asistenciales y en aplicaciones robóticas y sistemas integrados para la rehabilitación física.

El director general de Cartif y su 'número dos' expresaron sus críticas al diseño de los PERTE como instrumentos para canalizar la llegada de los fondos Next Generation a las empresas. José Ramón Perán señaló que la administración española no estaba preparada para recibir ese volumen de recursos, por lo que les hacer una "labor misionera", en el caso del referido al vehículo eléctrico, para convencer a las empresas de sus "bondades" y auguró que lo mismo ocurrirá con el de la agroalimentación.

En la misma línea, el subdirector general señaló que tras el "entusiasmo" inicial de las empresas, vino la "decepción" por el retraso, si bien señaló que ahora se encuentran en una nueva etapa para recuperar los fondos que no se han podido captar a través de por ejemplo el nuevo PERTE del vehículo eléctrico y los previstos para la descarbonización, la economía circular o el hidrógeno.

De la misma forma, José Ramón Perán indicó que al contrario de lo que se cree, investigar en España es "gratis" e incluso se puede ganar dinero a través de las subvenciones directas del Estado, las comunidades y Europa. Por ello, aseguró que les resulta "muy duro" constatar la falta de voluntad de algunas empresas por adentrarse en la modernización de sus sistemas de producción y en el desarrollo del diseño de productos.

Perán recordó los inicios de Cartif, ligados a la Universidad de Valladolid y la financiación "basal" de la Junta, con hasta 55 millones en los primeros años, si bien señaló que a partir de entonces el centro ha funcionado con sus recursos propios. Además, señaló que en diez años, a través de programas nacionales e internacionales, han traído a Castilla y León 240 millones de euros en actividad y 173 en subvención, algo que subrayó se ha notado "mucho" en Valladolid, al ser útiles a la Comunidad y fomentar el progreso científico.

Consolidación

Por su parte, el subdirector general de Cartif remarcó la "consolidación" y el "liderazgo" logrado en 2022 gracias a un equipo que consideró es una "mezcla perfecta e ideal" entre profesionales de mucha experiencia y una nueva generación que dan impulso para seguir evolucionando ahora que se acercan al hito del 30 aniversario de 2024. Remarcó que mantienen el "entusiasmo" y siguen trabajando con "ilusión" dentro de su compromiso con el desarrollo de Castilla y León.

Además, en el ámbito de la transformación de empresas y la mejora de la competitividad, Sergio Sanz destacó que trabajan con entre 200 y 300, generando oportunidades de negocio y actuando como departamento de I+D. También señaló que están generando y difundiendo conocimiento a través de iniciativa como la rehabilitación del barrio de Torrelago de Laguna de Duero, entre otros.

En cuanto al desarrollo de tecnología, explicó que el centro ejecuta tres tipos de proyectos: uno de de I+D+i para el desarrollo personalizado de empresas, los financiados con fondos públicos, normalmente cooperativos, para anticiparse al mercado, y ofrece asesoría a las administraciones públicas para mejorar la planificación y desarrollo de proyectos innovadores.

Proyectos

Los proyectos de desarrollo de tecnología más importantes para el centro en 2022 son el proyecto VALOMASK, que ofrece solución al gran problema medioambiental que ha supuesto el incremento exponencial de los residuos médicos generados en el contexto del brote de la pandemia; CO2SMOS, que desarrolla nuevas tecnologías basadas en procesos de conversión de CO2 biogénico en bio-productos químicos; K-HEALTHinAIR, que identifica los riesgos para la salud de la calidad del aire interior; FREE4LIB, que desarrolla una solución eficiente y sostenible al reciclaje de baterías de litio-ion al final de su vida útil; s-X-AIPI, que desarrolla un conjunto de herramientas innovadoras de tecnologías de Inteligencia Artificial (IA) autónoma, confiable y personalizada para la industria de proceso, INPERSO, que trabaja en el desarrollo de un sistema de impresión 3D de fachadas, EIAROB, que ayuda en la vida de las personas mayores y dependientes a través de la robótica, MATRYCS, que se encarga de definir y desplegar una arquitectura de referencia para el intercambio, gestión y procesado en tiempo real de datos de edificios; REHOUSE, que desarrolla ocho paquetes de renovación de edificios basados en tecnologías innovadoras; y MUSE GRIDS, que desarrolla sistemas de gestión de redes de energía locales interconectadas.