Las multas de tráfico vuelven a caer tras el repunte de 2021

A. G. Mozo
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Las sanciones descienden un 15% en Valladolid este año, pero, aún así, la DGT todavía detecta más infracciones que antes de la pandemia, a una media de casi doscientas diarias. Bajan las de velocidad, móvil y cinturón, pero suben las de alcohol

Agente de la Guardia Civil de Tráfico durante un control preventivo en las carreteras de Valladolid. - Foto: J. Tajes

Las multas de tráfico empiezan a bajar tras el histórico repunte que se produjo en 2021, que llevaron a Valladolid a su récord. Descienden las sanciones, fundamentalmente arrastradas por la caída registrada en las denuncias por no utilizar el cinturón de seguridad, por usar el móvil al volante y, sobre todo, por pasarse con el acelerador. Y pese a que este año va contabilizando una reducción respecto a lo ocurrido el pasado, la realidad es que se sigue estando por encima de los últimos años antes de la pandemia, a una media de 192 diarias que supone un incremento del 41% respecto a las 136 de 2019 (sacando de la ecuación la pandemia).
En cambio, en la comparativa con 2021 se da una caída del 15%, después de que la DGT anotase el pasado año su récord de multas de tráfico interpuestas en Valladolid. Las restricciones a la movilidad acababan en mayo de aquel año y o bien los conductores se relajaron demasiado, o bien la Guardia Civil se aplicó en exceso. De una u otra forma, lo único cierto es que se superaron las 83.000 sanciones, a una media de 228 diaras a la que jamás se había llegado. En 2015, 2016 y 2017 se estuvo por encima de las 200 al día, pero después fue bajando hasta las 172 de 2018 y esas 136 de 2019 que incluso llegaron a superarse ligeramente durante el pandémico 2020, cuando se llegó a 140 diaras, a pesar de las semanas de confinamiento y las múltiples restricciones a la movilidad que se aplicaron.
Lo que no cambia mucho es el tipo de infracción más común, ya que los datos que va dejando este 2022 apuntan a que el 65% de todas las denuncias de tráfico tramitadas en Valladolid son por cometer algún exceso de velocidad, según consta en la información facilitada a este periódico por fuentes del Ministerio del Interior. Y aunque son casi las mismas, los radares fijos vuelven a ser los que más imprudencias han detectado, a una media de 64 al día, por las 60 de los radares móviles, que hasta 2017 venían destapando más infracciones que los equipos cinemómetros fijos. En el análisis interanual, las de velocidad caen en un 25%.
Y después de los excesos con el acelerador, el concepto que más sanciones de tráfico provoca es no haber pasado la ITV. 24 cada día si se atiende a la estadística facilitada desde Interior; éste es uno de los pocos conceptos en los que hay un incremento de las sanciones. Otro es el de conducir bajo los efectos de las drogas.

Con drogas

Los agentes de la Guardia Civil ya buscan por igual a conductores ebrios que drogados. Es más, mientras las denuncias por positivos en alcohol también están bajando este año, las de positivos en drogas suben. A pesar de todo, Valladolid registra una media de un conductor drogado al día, por los dos que todavía se ponen ebrios al volante.
También bajan las sanciones por circular sin el cinturón puesto y las relativas al uso del móvil cuando se está conduciendo. Aún son unos descensos muy ténues y hasta la propia jefa provincial de Tráfico es rehacia a otorgarle 'medallas' a la ley de seguridad vial reformada en marzo para elevar el castigo –en puntos, no en dinero– por saltarse ambas normas. Inmaculada Matías dice que «todavía es pronto para afirmar que bajan las denuncias o los accidentes por esta nueva ley», pero lo único cierto es que las de cinturón casi bajan a la mitad, de las cuatro diarias de 2019 y 2021, a las poco más de dos que se vienen dando este año.

El móvil

En el caso del móvil, la caída es solo de un 13% pero es un primer paso para lograr el objetivo marcado por la DGT de desterrar el teléfono de las manos de todos los conductores. La reforma legal que entró en vigor en marzo elevaba al máximo el castigo por manipularlo al volante, hasta por llevarlo sujeto de la mano; seis puntos menos en el carné y los mismos 200 euros que se imponían antes del cambio, pero que parecen estar surtiendo efecto, pese a lo cual todavía son más de dos los conductores cazados con el móvil al volante.