Valladolid tendrá dos conexiones por AVE al norte en un lustro

Óscar Fraile
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La previsión que maneja el Gobierno es estrenar el enlace León-Asturias en mayo del año que viene y el de Burgos-Vitoria y la 'Y' vasca, en 2027, pero el Ejecutivo rehúsa dar plazos para el de Santander

Las obras en la Variante de Pajares están a punto de finalizar. - Foto: Ical

La entrada en funcionamiento este jueves del AVE entre Burgos y Madrid supone un pequeño paso en el anhelo que tiene Valladolid por estar conectada con el norte del país por alta velocidad. El efecto más inmediato para la provincia es que los pasajeros ya pueden hacer el trayecto entre la estación de Campo Grande y la de Rosa Manzano en 36 minutos en AVE o en 46 en Avant, frente a la hora y 8 minutos que se tardaba hasta ahora.

Independientemente de tener 'más cerca' la provincia burgalesa, la inauguración de esta línea supone un importante avance en la futura conexión de Castilla y León con el País Vasco, de la que se beneficiará Valladolid. Aunque en este punto hay que pasar de la certeza de lo que ya es realidad a la incertidumbre de un proyecto que acumula muchos años de retraso, la Y vasca, formada entre lo que será la conexión de Vitoria con Bilbao y San Sebastián.

Pero para que este proyecto se convierta en un eje vertebrador desde el centro de la península hasta el norte, necesita que también sea realidad la conexión entre Burgos y Vitoria. Precisamente esta semana el Consejo de Ministros ha autorizado a Adif sacar a licitación la redacción de los proyectos básico y de construcción de esta línea por un valor estimado de 27,4 millones de euros. Serán 101,3 kilómetros de longitud que supondrán una inversión de 1.492 millones de euros.

La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, dijo en una visita a Vitoria en febrero que las previsiones que maneja el Gobierno es que la Y vasca esté terminada dentro de un lustro, en 2027, un plazo en el que confía en que también esté lista la conexión entre Burgos y Vitoria. Pero son solo previsiones en el desarrollo de una infraestructura que en otros tramos ha acumulado años de retraso.

Otra de las conexiones de alta velocidad pendientes es la de Palencia con Santander, a través de Reinosa. En este caso, los plazos están mucho menos definidos. La propia ministra evitó darlos en una reunión que mantuvo el pasado mes de marzo con responsables del Gobierno de Cantabria. Actualmente hay dos tramos en obras, Palencia Norte-Amusco y Amusco-Osorno, ambos adjudicados el año pasado. Además, el Gobierno acaba de sacar a licitación la construcción de la plataforma del tramo inicial, de Palencia a Palencia Norte, por casi 41 millones y un plazo de ejecución de 30 meses. Los tres tramos suman 44 kilómetros de longitud y representan algo más de la mitad de los 78,3 kilómetros totales que incluye la nueva línea de alta velocidad entre Palencia y Nogales (Alar del Rey y Aguilar de Campoo). Para completarlos, se avanza en la redacción de los proyectos del siguiente tramo hasta Reinosa. El proyecto se completará con una «renovación integral» de la red convencional que va hasta la capital. Y no parece que todo esto pueda estar listo a medio plazo, aunque actualmente hay conexiones con Alvia desde Valladolid a Santander que tardan poco más de tres horas.

La que parece que tiene un futuro más despejado y la que se podrá empezar a disfrutar antes es la conexión con Asturias, a través de León. Ya existe un compromiso firme por parte del Ministerio de que la inuguración de la Variante de Pajares se produzca en mayo del año que viene.

Actualmente el viaje entre Madrid y Oviedo en Alvia tiene una duración de cuatro horas y 32 minutos. Pues bien, el consejero de Cohesión Territorial del Principado, Alejandro Calvo, reconoció en La Voz de Asturias que el AVE reduciría ese tiempo a las dos horas y 56 minutos. Es decir, una hora y 36 minutos menos. Si ese ahorro de tiempo se aplica a las tres horas y 32 minutos que se tarda desde Valladolid con el Alvia, el trayecto final desde Campo Grande duraría dos horas y 16 minutos.

Otro proyecto pendiente, esta vez con el noroeste, es el conocido como la 'U' de Olmedo, un bypass que permitirá unir Valladolid con la línea de alta velocidad que va a Galicia. Adif anunció el pasado mes de febrero que ya se había adjudicada la redacción del proyecto para la construcción de una plataforma que «permitirá conectar dichas líneas de alta velocidad mediante un ramal directo de enlace en el entorno de Olmedo, de modo que los tráficos puedan circular directamente en la red de alta velocidad entre la estación de Valladolid-Campo Grande y Galicia, a través de Zamora, evitando el recorrido adicional hasta Madrid, y disminuyendo los tiempos de viaje actuales en la relación Valladolid-Olmedo-Zamora-Galicia». La plataforma en vía única discurrirá por La Zarza, Olmedo y Hornillos de Eresma, con una longitud de ocho kilómetros.