La ola de frío se va de la mano de un gélido mes de enero que ha marcado esta mañana la temperatura más baja del invierno en Valladolid: -4,1 en la capital y hasta -8,6 en algún punto de la provincia. Son registros que no se daban desde enero de 2022 y que, en principio, pasarán a ser historia en las próximas horas, ya que la previsión meteorológica habla de una progresiva subida de las temperaturas que llevará las máximas hasta los 13 grados el próximo fin de semana.

La madrugada y, sobre todo, las primeras horas de la mañana de este 31 de enero han sido las más frías de este invierno. La capital vallisoletana lleva ya varios días amaneciendo bajo cero, pero si el lunes 30 de enero se llegó a una mínima de -3,5, este martes se ha superado ese registro para convertir esta jornada en la más gélida de la estación, a falta todavía de mes y medio para entrar en la primavera. Esos -4,1 están muy lejos de la que es la mínima histórica de Valladolid, aquellos -11 grados que se dieron el 12 de enero de 1985.

En la provincia, el mercurio ha caído incluso más. Los -8,6 que son por ahora récord de la jornada los ha registrado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en la estación que tiene en Sardón de Duero, mientras que en Villalón se anotó una mínima de -6,9 y en Fuente el Sol, una de -7. En Peñafiel se llegó a -6,3; en Medina de Rioseco, a -6,2; en Rueda, a -5,6 y en Olmedo, a -4,9.