La organización de consumidores Facua denunció ayer ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a siete grandes cadenas de distribución por no repercutir la rebaja del IVA a todos los alimentos afectados por la medida aprobada por el Gobierno, en vigor desde el 1 de enero.

Facua ha revisado la evolución de 676 precios en Alcampo, Aldi, Carrefour, Dia, Eroski, Lidl e Hipercor (las 7 denunciadas), además de Mercadona, a través de unos análisis que ha llevado a cabo entre los días 30 de diciembre y 3 de enero.

En el estudio se detectan 52 casos en los que no se aplica una bajada en el precio equivalente a la del IVA, ya que 34 son idénticos que al finalizar el año, 11 no han repercutido la totalidad de la rebaja fiscal y siete son incluso más elevados.

El secretario general de Facua, Rubén Sánchez, informó que en la mayor parte de los casos se cobra a los consumidores el mismo importe que antes de la bajada del impuesto, con lo que aumenta el beneficio del establecimiento.

El número más alto de anomalías se detectó en Dia, con 14 irregularidades en los 81 precios comparados (un 17 por ciento), seguida de Carrefour, donde de los 113 artículos estudiados no ha repercutido la bajada del IVA en 11 (un 10 por ciento); Eroski, con ocho precios incorrectos de 92 evaluados; y Alcampo, con seis productos irregulares de 96.

En Lidl también se registraron seis artículos más elevados de 70 comparados, mientras que en Aldi fueron denunciados cinco casos de 64 y en Hipercor solo se encontró una irregularidad en 76 elementos, mientras que en Mercadona no se localizaron ninguna anomalía.

También hay productos en los que el precio de venta al público es incluso superior al de los días previos a la entrada en vigor de la medida, a la vez que se detectaron casos en los que la bajada es inferior a la que debería aplicarse e incluso prácticas incorrectas de redondeo al alza para sumar algún céntimo, cuando debería ser a la baja.

Facua continuará durante los próximos meses con seguimientos de precios para recordar a los establecimientos que no pueden subir los precios de los alimentos afectados por la bajada del IVA.