La presidenta del Grupo Popular en el Ayuntamiento, Pilar del Olmo, hace balance tras un año difícil por la pandemia y explica el cambio desde una oposición colaboradora al inicio de la crisis sanitaria al actual enfrentamiento con el alcalde.

Acabamos de iniciar 2021, es buen momento para hacer balance del año más duro, complicado y difícil en la gestión municipal

Yo hago un balance positivo, porque hemos trabajado mucho por Valladolid en una situación que nunca imaginamos. La pandemia ha cambiado todos los planes también de mi grupo municipal, porque empezó en marzo y no nos hemos desprendido de ella desde entonces.

Y digo positivo por el trabajo que hemos hecho e intentado que el Ayuntamiento hiciera. Empezamos con una actitud totalmente colaborativa en algo que no sabíamos lo que iba a ser realmente en esos momentos, aunque algunos que llevamos años en la cosa pública pensamos que no iba a ser nada fácil, a pesar de que algún concejal socialista me llamaba alarmista. Y no, no era alarmista, simplemente que es bueno para un político anticiparse a lo que va a pasar y yo lo veía venir.

Pero tras esa actitud de colaboración nos sentimos totalmente traicionados, mientras todos estábamos confinados, el equipo de gobierno estaba haciendo un plan de movilidad, un plan de ciudad, para el que no contó con nosotros ni se nos informó, a pesar de que estábamos colaborando para salir adelante en esta horrorosa crisis. Apartir de ahí, lógicamente nuestra actitud tuvo que cambiar.

¿Meditaron si un plan de movilidad era suficiente para romper la colaboración para intentar evitar el impacto tan duro de la crisis?

Nosotros desde ese momento lo que hicimos fue aportar siempre ideas, pleno tras pleno, para que el Ayuntamiento hiciera más, porque realmente yo he visto que excepto en el momento inicial en el que estuvimos en el grupo de trabajo, luego no ha hecho nada por evitar toda la crisis económica y social provocada por la pandemia que está viviendo la ciudad. Las medidas iniciales son las que se han ido llevando a efecto, muchas muy torpemente, porque no ha conseguido finalizar ni siquiera algunas, casi ni ponerlas en marcha. Tampoco he visto una actitud totalmente activa en Óscar Puente. 

¿Qué balance hace de la aplicación de esas medidas? 

Lo que más nos preocupó y lo primero fue la crisis social, por supuesto que también la sanitaria, pero empujamos para reforzar todos los servicios dirigidos a las personas mayores que vivían solas o dependientes que necesitaban más ayuda que nunca.

Y en lo económico, las medidas que propusimos desde el principio consistían en ayudar a los sectores cerrados, en un primer momento todos, así como el famoso Plan Reactiva, que propusimos nosotros y todos estuvieron de acuerdo. El ayuntamiento quería poner solo 2 millones y nosotros le dijimos que por lo menos hubiera 5 millones, que es lo que finalmente han hecho. Aún así hemos seguido insistiendo porque muchísima gente estaba necesitada, fíjese que ha habido prácticamente 6.500 solicitudes de pymes y autónomos en Valladolid, y aún así a 31 de diciembre estaban todavía prácticamente sin resolver la inmensa mayoría. Les pedimos bonificaciones impositivas, bonificación para los hoteles, las tasas de las terrazas, las tasas de los feriantes, todo eso, nosotros se los propusimos, que es verdad que hay un acuerdo, y se hizo, pero a partir de aquellas medidas, ¿qué más ha decidido el Ayuntamiento? 

No sé si el ruido de la bronca política está tapando un poco las consecuencias de la tercera ola o parece que ahora se habla menos de ello. ¿Nos falta todavía lo peor desde el punto de vista económico?

Bueno, está claro que los propietarios de todos los negocios que han estado cerrados, y no solo la hostelería que es muy importante, sino también los gimnasios, los taxistas, los distribuidores, etc. se han endeudado, muchos de ellos no volverán a abrir, mucha gente se va a ir al paro. Ahora se está sujetando por los ERTE, pero el día que desaparezcan esto va a ser un desastre. Y no vemos recambio ni alternativas porque el Ayuntamiento no se dedicado a buscar nada que pueda servir como alternativa a todos los que se quedan en paro.

Se acaba de aprobar un presupuesto con la mayor inversión. ¿Considera que esos 70 millones engloban ya las partidas detalladas, es un presupuesto para reactivar la economía?

Lo primero es que muchas de las partidas contempladas en el anexo de inversiones de este año, ya estaban en 2020 y algunas también hace 2 años, y no se han hecho. El PP planteaba en una enmienda quitar una parte de las inversiones porque no las van a hacer, ya que los años anteriores han sido incapaces de ejecutar la mitad de las inversiones y eran menores, para dedicar los esfuerzos a cosas más necesarias. Y luego si nos fijamos, el presupuesto es igual que el de 2019 con más inversiones, que como ya hicieron ese año no van a llevar a cabo.

Así, no han incrementado de manera especial las ayudas a sectores desfavorecidos, comedores, el albergue, o sea, a las personas que lo van a pasar mal, pero sí lo han hecho con las inversiones. Han hecho un presupuesto continuista sin tener en cuenta la pandemia.

La diferencia este año es que por primera vez se cierra el ejercicio anterior con déficit y con poca ejecución, ¿le preocupa el escenario económico municipal?

¿La herencia? Pues sí, me preocupa porque el Ayuntamiento de Valladolid siempre ha presumido de estar muy saneado, de terminar siempre con superávit. Pero no es que quisieran ahorrar, es que nos les quedaba más remedio porque había que cumplir las reglas fiscales, que se han relajado en 2020, y además hacían unos presupuestos que no se ejecutaban porque no podían, porque las reglas fiscales se los impedían. Si hubieran podido gastar todo lo que ingresaban hubieran tirado la casa por la ventana, ya hace mucho tiempo, como han hecho este año. El año pasado incorporaron todos los remanentes para el fondo covid y este 2021 quieren hacer lo propio, por lo que en vez de terminar con el déficit que está presupuestado, terminarán con mucho más. Es decir que vamos a tener una herencia envenenada, porque yo espero que el Ayuntamiento cambie de color. Van a dejar a deber mucho dinero y el déficit será bastante abultado tras los años 2020 y 2021. 

Ya que habla de cambio de color, se está especulando mucho con la candidatura municipal del PP. Usted se ha mostrado dispuesta a repetir, la oposición se ha vuelto más fuerte, no sé si por presiones del partido... ¿qué tiene que decir a todo este movimiento?

Siempre hay mucho pensante que especula más allá de la realidad. Mire, si estoy aquí ahora haciendo oposición, que es lo que me ha tocado y es donde quieren los ciudadanos que esté, es porque quiero. Pero lo que yo quiero es conocer mucho mejor mi ciudad y llegar a las siguientes elecciones para que los ciudadanos digan que se marchen a éstos que gestionan tan mal y están haciendo cosas que no beneficia a la ciudad. Por eso, mi intención es estar para otra legislatura y ganar, por supuesto. Yo creo que no debo de perder ni un minuto con la gente que intenta enfrentarnos dentro del partido, cuando realmente no hay ningún enfrentamiento.

La intención de mi partido, el Partido Popular, es ganar las próximas elecciones, y yo considero que la mejor posicionada soy yo, no tengo nada más que decir.

¿Se siente sola o se arrepiente de estar aquí?

No, no me siento sola, afortunadamente me siento acompañada por todo mi grupo y no me arrepiento de estar aquí. Yo creo que donde estás tienes que darlo todo. Y también me siento acompañada por mucha gente de mi partido, pero claro los partidos no son como en la URSS, monolíticos, siempre hay corrientes, diferentes ideas, unos a los no gusta como haces la oposición y otros que están encantados. Todo eso cabe dentro de un partido como el PP que es muy amplio, con gente que piensa de diferente manera. Yo estoy intentando explicar a todos los afiliados de Valladolid lo que hacemos porque es importante que lo conozcan y muchas veces no aparece en ningún sitio. Quiero contar con el apoyo de los afiliados. 

En este trabajo interno del partido, ¿el presidente de la Diputación le mantuvo al tanto de la decisión sobre los bomberos? ¿Tienen contacto y colaboración permanente?

Sí, estaba informada de todo sobre la posibilidad de no firmar el convenio con el Ayuntamiento porque era muy caro. Yen todo momento defiendo al presidente de la Diputación que considera que con los medios que dispone en el alfoz va a poder cubrir todas las necesidades. Además, no se han entendido porque la subida del convenio era muy importante. 

¿Y está de acuerdo en esa posición municipal, los números a usted tampoco le cuadran?

Creo que tanto Diputación como Ayuntamiento tendrán sus motivos, pero evidentemente la Corporación provincial tiene que velar por dar ese servicio de la manera mas económica posible, y si ahora se plantea un coste mucho más elevado, pues quizás era una subida desproporcionada.

Tiene de compañero de escaño al padre de las mancomunidades y siendo la de Valladolid la primera, ¿no le parece sorprendente que aún no se haya dado ningún paso para su desarrollo?

Claro pero el que preside la mancomunidad lo tiene que convocar y tener la voluntad de que funcione. Pero si no convoca ni propone nada, pues ni hacemos el transporte metropolitano, ni los taxis pueden ir casi de un lado a otro por falta de acuerdo, es que casi no se ha avanzado nada. Quien tiene la posibilidad de hacerlo funcionar, no quiere. Si el primer paso era intentar compartir entre todos los gastos de los bomberos y le cargas a la Diputación un sobrecoste tan elevado pues no me extraña que no haya habido ese acuerdo. 

¿La mancomunidad, la movilidad y los atascos son suficiente para generar ese cambio de gobierno al que aspira o solo el ejemplo de una mala gestión?

Es un ejemplo de que las cosas se hacen con los pies y no con la cabeza. No me parece ni medio normal que se estén haciendo carriles bici y ni siquiera se haya contratado el plan de la bici. O sea primero hacemos los carriles bici por donde nos da la gana, pintados en un lado, segregados en otro, sin unión en muchos casos, y después el plan de la bici, pero en qué cabeza cabe. Digo esto como un ejemplo de la mala gestión, no aproveches el confinamiento de todos para hacer un plan de movilidad. Porque no son solo carriles bici, son 21 calles modificadas, carriles para los bus y taxis, son un montón de cosas.

Y hablando de movilidad y dinero, ¿les preocupa la situación financiera de Auvasa, que si sigue así la situación económica, posiblemente llegue a un escenario casi de quiebra?

Como el año pasado se permitía flexibilizar las reglas fiscales, Auvasa creo que ha cerrado con un déficit de aproximadamente 5 millones y este año también se prevé cerrar en negativo. Es verdad que la situación de pandemia ha hecho que mucha gente no utilice el transporte publico, pero es que no tiene las debidas medidas de seguridad, como hemos denunciado muchas veces. Parece que se desinfectan los autobuses, pero lo lógico es que pongan hidrogel a la entrada porque las barras las tocan muchas personas. Quiero decir que no se hace una política activa para que la gente tuviera total seguridad en el transporte público, y así desciende de forma alarmante el número de viajeros. No se está gestionando bien Auvasa, pues mire el metro de Madrid como debe ir lleno. Aquí a lo mejor había que poner más líneas para evitar el exceso de aforo, ya que parece que el conductor no lo puede controlar, además de conducir y estar sometido a los contagios.

¿Entiende que el grupo de Ciudadanos haya apoyado los presupuestos municipales, teniendo en cuenta además que en él está la vicepresidenta de la Diputación, donde gobierna en coalición con el PP?

La verdad es que había instrucciones a nivel nacional de Inés Arrimadas para que apoyaran los presupuestos, gobernara quien gobernara, pero yo creo que han sido muy poco exigentes porque al final qué han sacado en limpio. ¿Un fondo de contingencia de un millón de euros?, eso no es nada para afrontar la pandemia, ¿que más han sacado que no tuviera previsto el equipo de gobierno? los planes que no se saben en que se van a concretar y otras cosas largamente demandadas como los 300.000 euros del Polígono de Argales, que lo llevábamos pidiendo pleno tras pleno, y que ya estaba previsto.

¿Y cómo valora el comunicado de su portavoz que de alguna manera trató de desactivar la polémica sobre las vacaciones del alcalde?

Me sorprendió su gran memoria porque ninguno de los asistentes a la reunión recordábamos que el alcalde dijera que iba a adjudicar un contrato a un amigo suyo. Aunque esto ya es malo de por sí, la ley le obliga a abstenerse. Por lo tanto, es imposible que me dijera a mí eso porque le hubiera dicho lo mismo que ahora, que se tiene que abstener. Con independencia de ello, lo que está claro es que un contrato de emergencias se adjudicó a dedazo y punto, sin pedir ofertas a nadie. Posteriormente hubo otros contratos similares y no se hicieron tan a dedo, porque sí se pidieron ofertas.

Esto está muy mal hecho y habrá que revisarlo, pero es que luego no ha justificado quién ha pagado sus vacaciones ante las acusaciones de un medio de comunicación que lo ha podido comprobar, yo no lo he visto. Es muy fácil, si tú has pagado tus vacaciones inmediatamente sacas la factura, y si no la tienes la transferencia bancaria o el pago con la visa. Pero sigue sin justificarlo después de mucho tiempo.

Después de esto supongo que es muy difícil volver a encontrar vías de entendimiento y colaboración, ¿ni tan siquiera una crisis como la actual permitirá acuerdos entre los dos partidos mayoritarios?

No puede haber posibilidades de acuerdo porque nuestro grupo no ha traído ni el bogavante ni el yate, precisamente en un momento en el que Valladolid no estaba bien. Yen vez de ir a una reunión con el presidente de la Junta, que convocó a los alcaldes para intentar tomar medidas contra la pandemia, Puente estaba en el yate comiéndose un bogavante. Mire, hasta ahí podíamos llegar, aunque jurídicamente no sé cómo puede acabar, éticamente está muy feo. Es una muy mala imagen para este político, pero al final afecta a toda la clase política, aunque debo dejar claro que no todos somos iguales.