Peñafiel dedicará una calle al queso Flor de Esgueva

Óscar Fraile
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El municipio cambiará la denominación de la actual calle Calvario para rendir homenaje a una marca que ha llevado el nombre de la localidad por toda España durante décadas

La calle Calvario pasará a llevar el nombre de Flor de Esgueva en los próximos días. - Foto: D. V.

El queso Flor de Esgueva y el municipio de Peñafiel reforzarán a partir de la semana que viene un vínculo que se inició hace más de 30 años. La localidad ha decidido dar el nombre de este queso a la calle que hasta ahora se llamaba Calvario y que está ubicada junto a la fábrica, perpendicular a la avenida de la Residencia y a la carretera de Cuéllar. La medida se aprobó hace tiempo en el pleno municipal y se hará efectiva en los próximos días, con un acto al que acudirán representantes de la compañía y el alcalde de la localidad, Roberto Díez, quien señala que «la industria agroalimentaria es muy importante para Peñafiel».

El regidor ha valorado que Flor de Esgueva haya llevado durante décadas el nombre de Peñafiel por el resto de España. Según él, el hecho de que «un producto de tanta calidad» se vincule al municipio es positivo para su imagen. Grupo Lactalis recuerda que Flor de Esgueva apareció en 2020 como el queso más deseado por los consumidores españoles en la clasificación de marcas que anualmente realiza la empresa de investigación de mercados Ipsos.

El alcalde también ha tenido en cuenta el empleo directo generado por esta industria, ya que la mayor parte de los trabajadores residen en la zona. «Es algo que también beneficia a toda la comarca», añade en referencia al empleo indirecto. «Hay que tener en cuenta todo lo que supone para la ganadería, el transporte, los piensos y todo lo que hay detrás de la leche de oveja», dice. Además, considera que es una actividad muy importante para un sector como el ganadero, que, según Díez, está «en decadencia». «Cada vez hay menos activos y estamos viendo cómo muchas explotaciones cierran, por eso tenemos que apostar por ello», sostiene.

Tanta es la vinculación de este queso con el municipio donde se produce que en su propia etiqueta aparece el castillo de la localidad. Ahora el pueblo le ha devuelto este guiño y será el queso el que quede inmortalizado en el callejero.