Reclaman más plazas en el Colegio de Educación Especial nº1

Óscar Fraile
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La Junta está estudiando crear una nueva unidad después de que varias familias se hayan movilizado porque solo hay dos vacantes para el próximo curso, pese a que siete niños han solicitado entrar

Inés Juan, en primer término, y Marga son dos de las madres que se están movilizando. - Foto: Jonathan Tajes

Varias familias de niños con discapacidad se han movilizado en los últimos días para reclamar a la Consejería de Educación que aumente las plazas del Colegio de Educación Especial nº1, situado en el barrio de Covaresa. Se trata del único centro público de la capital de estas características y las familias denuncian que no tiene plazas para satisfacer la demanda de estudiantes para el próximo curso.

Sus dos únicas vacantes se quedan cortas para las siete familias que han solicitado una plaza, por lo que algunas de ellas reclaman la creación de un nuevo aula. Se da la circunstancia de que cada una de estas clases tiene un máximo de cinco alumnos, por lo que la puesta en marcha de una nueva serviría para acoger a los cinco niños que, hoy por hoy, se han quedado sin plaza.

Inés Juan, una de las madres que se ha movilizado, explica que, de no conseguir plaza en este centro, las familias tendrían que recurrir a uno de los dos concertados que hay en la capital: el Pino Obregón, situado en el Camino Viejo de Simancas, o el Obra Social del Santuario, ubicado en la calle homónima.

- Foto: Jonathan Tajes

Uno de los problemas de esta segunda opción es que, según Inés, las familias tendrían que asumir un coste de unos 200 euros al mes. Pero no es el principal. Esta madre denuncia que en estos centros no se ofrece un servicio sanitario como en el público, donde hay una enfermera durante toda la jornada. "Mi hijo sufre episodios de epilepsia que se solucionan con inyecciones intramusculares que solo puede poner una enfermera", señala. Inés asegura que en otros centros la presencia de esta profesional solo se reduce a un número determinado de horas, y "nadie garantiza que esté allí cuando el niño lo necesite".

El Equipo de Orientación en Educación Infantil y Atención Temprana de Valladolid telefoneó hace semanas a Inés para instalarla a elegir opciones alternativas a este colegio, ante la posibilidad de que no hubiera plazas, y dado que ella solo había puesto como primera opción el colegio público de Covaresa. Ella respondió con una carta a la Dirección Provincial en la que recordaba que su hijo presenta "episodios epilépticos que únicamente ceden con medicación administrada de forma intramuscular (inyectada)". A continuación aseguraba que, "como es imprevisible el momento en el que pueden presentarse dichos episodios, es imprescindible que el centro disponga de personal sanitario de enfermería o médico, con presencia física en todo momento en el que el niño se encuentre en el centro". Y finalizaba incidiendo en que el único centro que tiene estas garantías es el Colegio Público de Educación Especial número 1.

Además, Inés adjuntó un informe médico de la propia Gerencia Regional de Salud en el que se reconoce que su hijo tiene una "pluripatología compleja" y necesita de la presencia de estos profesionales como prevención ante sus episodios.

Fuentes de Educación confirmaron a este periódico que la Consejería "está estudiando la posibilidad de crear una nueva unidad en el Centro de Educación Especial número 1 para dar respuesta a la demanda de las familias".