Belén Viloria

TITULARES DEL FUTURO

Belén Viloria


La importancia de tener referentes

17/03/2023

Cuando eras joven ¿quién era tu referente? Todos en nuestra vida hemos buscado o necesitado, consciente o inconscientemente, alguien que nos motive, alguien en quien fijarnos o a quien parecernos porque nos gusta lo que es o lo que hace, alguien a quien preguntar, que nos sirva de guía y de quien aprender. En definitiva, un ejemplo, un referente, o incluso con mucha suerte un mentor.

Es muy habitual encontrarlos en la propia familia; uno de los padres, un hermano mayor, algún familiar viajero, o el entorno más cercano, un profesor, un amigo, pero sobre todo buscamos fuera de ella; deportistas, astronautas, bomberos, actores, cantantes… en general siempre han sido un clásico referente, pero la variedad y combinaciones posibles son enormes, porque se puede tener múltiples referentes en diferentes campos dependiendo de las diferentes motivaciones de cada uno.

Ahora bien, por un lado, no todo el mundo tiene la suerte de tenerlo en el entorno cercano, y por otro, hoy hay también otro tipo de referentes, como los influencers, algunos muy cuestionados, pero en todo caso, tener motivación es lo primero y fundamental para buscarlo y encontrarlo.

El presente y futuro de los jóvenes no parece muy halagüeño. Cerramos el 2022 siendo el país de la UE con la mayor tasa de paro juvenil (32,3%) y uno de los países que más ha empeorado en el último año. Si a esto unimos la ecosansiedad producida por la falta de esperanza ante el cambio climático, o la soledad y aislamiento provocado por las redes sociales, hace que nos encontremos con los jóvenes más apáticos y sin motivaciones, y con los mayores niveles de conductas suicidas de la historia.

Por eso cobran más relevancia que nunca los programas de jóvenes referentes, en diferentes ámbitos. En el día a día, como por ejemplo los programas de éxito escolar de Cruz Roja para niños y jóvenes en situaciones de vulnerabilidad que no tienen la suerte de tener referentes en su entorno cercano y estos jóvenes se convierten en su persona de confianza con la que aprender valores, estudiar más y mejor o sentirse acompañado. O en las universidades, donde también se están creando o intensificando los programas de mentores para que los alumnos puedan tener una mayor orientación sobre las diferentes opciones de futuro y vida. O programas y premios como los de la Fundación Princesa de Girona, cuya primera edición fue en 2010, y que buscan promover y fomentar la iniciativa, el esfuerzo y el desarrollo del talento de los jóvenes identificando referentes con capacidad de impacto y transformación en diferentes materias; Artes y Letras, Empresa, Investigación Científica y en el ámbito Social, pero sobre todo referentes por sus valores y cualidades, y que quieran compartir su experiencia y visión.

Precisamente esta semana se ha estado celebrando en Valladolid, la segunda parada de la Fundación, de lo que llaman el Tour del Talento, en la que se ha elegido al referente de la categoría empresarial, Rafael Jordá, un ingeniero aeroespacial creador de Open Cosmos y se han estado realizando diferentes actividades con jóvenes como en todas las ciudades elegidas cada año para cada categoría.

Tengo el placer y honor de estar siendo estos últimos años jurado de la categoría social y también la enorme responsabilidad ya que los jóvenes seleccionados, serán para siempre un referente para muchos otros. Sentimos que no podemos equivocarnos, así que no sólo analizamos el impacto de lo que hacen, sino lo que son hoy, y mucho más allá, tratando de visualizar su futura trayectoria personal y profesional. Este año en la categoría social en Zaragoza, ciudad que inauguró el Tour, hemos premiado la constancia, determinación, sensibilidad, humildad y compromiso de un trabajo extraordinario de 10 años de una joven, Silvia Fernández Cadevall que, en un mundo de inmediatez y resultados rápidos y a veces de dudosa o efímera calidad, ha ido consolidando paso a paso su extraordinario proyecto Artepaliativo con un impacto impresionante.

Sin duda estamos viviendo momentos complicados como sociedad, con enormes retos como humanidad que sólo se solventarán si somos capaces de impulsar en los jóvenes, no sólo las necesarias competencias y valores, sino lo más básico y esencial; la motivación y ganas para afrontarlos, la motivación por vivir. Sólo con eso también cada uno de nosotros podemos convertirnos hoy en sus referentes.