Una situación inédita en La Santa Espina. Los vecinos de esta localidad pedánea están sorprendidos por los estragos que la sequía está ocasionando en el pantano del río Bajoz. Tanto que los niveles del pantano se encuentran actualmente en mínimos debido a la falta de precipitaciones. Ya en el mes de junio, el río Bajoz comenzó a secarse y, por consiguiente, su caudal dejó de llegar al pantano de La Santa Espina. Poco a poco, con el paso de las semanas, el nivel del embalse ha ido descendiendo y ahora mismo ha bajado hasta tal punto que los embarcaderos se encuentran alejados unos tres o cuatro metros de la orilla. 

La sequía está ocasionado que los tradicionales paseos en la senda junto a la orilla ya no se puedan dar. En algunos tramos del pantano la orilla ha 'retrocedido' unos diez metros y la parte más cercana al río ya ni siquiera existe. Esta semana, unas mil personas se han congregado en el entorno para hacer una prueba deportiva y han podido comprobar el escaso nivel de agua. 

El alcalde de Castromonte, Heliodoro de la Iglesia, destacó que han mantenido varios encuentros con  responsables de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD) para intentar solventar este problema, aunque por el momento no existe solución. El cauce no tiene ningún tipo de regulación y, aunque no se extrae agua para riego, sí tiene un fuerte inconveniente que ayuda a que se seque durante la temporada estival. «Desde que nace hasta el embalse hay unos tres kilómetros, pero a falta de uno y medio hay unos meandros que hacen que se acumule mucha agua y se pierda», comenta el regidor, quien indicó que han solicitado en varias ocasiones al organismo de Cuenca pequeñas actuaciones para limpiar el cauce.

101022JT_0237.JPG - Foto: Jonathan TajesEl regidor indicó que no es la primera vez que el cauce del Bajoz se seca completamente durante el verano. «Ya llevamos unos siete u ocho años igual». Entiende que la CHD debería realizar una actuación en la limpieza del cauce para mejorar que el agua pudiera llegar al embalse. «Nos han dicho que no tienen fondos para hacerlo, pero es necesario». Este año, debido a la pronunciada bajada del caudal, las imágenes del embalse son inéditas. 

barro. La bajada tan pronunciada del agua ha ocasionado incluso que una parte del pantano haya desaparecido debido a la falta de caudal procedente del río. Una parte importante del pantano se ha evaporado e incluso con la llegada de las primeras lluvias de septiembre y octubre. «Aún está seco el río. No corre nada de agua», comenta el regidor. 

En algunas partes, el embalse? parece más un río, ya que el nivel es muy escaso. El barrio, las piedras y las ramas de los árboles que tradicionalmente permanecen debajo del agua están a la vista. La parte más profunda del embalse continúa siendo la más cercana al paseo que parte desde la carretera de La Santa Espina, aunque también se aprecia un notable descenso.  

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