La Sala de Exposiciones del palacio Pimentel, sede de la Diputación de Valladolid, ha inaugurado este miércoles el tradicional Belén Bíblico Monumental, a cargo de la Asociación Belenista Castellana, y que en este 2020 ha recuperado el montaje de 2014 ambientado en Tierra Santa y el mar de Galilea y que se podrá visitar hasta el próximo 6 de enero.

"¡Se armó el Belén!", ha bromeado el presidente de la Diputación, Conrado Íscar, durante la presentación del mismo. "La situación de pandemia nos llevó a plantearnos la posibilidad de suspender este montaje, pero, al final, hemos entendido que teníamos que intentar acercarnos a la mayor normalidad posible en una celebración que, sin ningún género de dudas, forma parte de nuestras vivencias más íntimas", ha reconocido.

En este sentido, Íscar ha recordado que ha recordado que la Navidad es "una fiesta que trasciende lo meramente comercial e, incluso, el sentimiento religioso", pues es el tiempo del "nacimiento de una nueva promesa, de un mundo nuevo que siempre puede ser renovado". Y ese es, precisamente, "un mensaje más necesario que nunca en una sociedad machacada por la COVID", ha incidido.

Por ello, coincidiendo con las fiestas navideñas, se pondrá en marcha en redes sociales la campaña 'Descubre tu sonrisa' en la que participan cinco humoristas de la provincia: JJ Vaquero, Sergio Encinas, Fran 'El Chavo', Roberto 'Chapu' y Sofía de la Iglesia.

Cada uno de ellos ha grabado un pequeño monólogo con el objetivo de "poner una sonrisa en esas caras tapadas por la necesaria mascarilla". Como ha señalado Íscar, "el objetivo es intentar arrancar a todas las personas de la provincia una sonrisa que les aparte, aunque sea solo durante un minuto, de las preocupaciones, las tensiones y la tristeza que la pandemia y sus restricciones han ido asentando en la vida cotidiana".

Además, este año, como preludio al Belén Bíblico Monumental, la sala Teresa Ortega Coca, previa al mismo, acoge una exposición de la colección filatélica belenista de Ricardo Rodríguez Gómez, uno de los padres del belenismo vallisoletano, y que atesora sellos de inspiración belenista procedentes de los cinco continentes.

Tras señalar que en 2019 fueron más de 28.000 los visitantes que se acercaron a disfrutar del Belén de la Diputación, "una cifra que, evidentemente, no podrá alcanzarse este año, debido a las limitaciones de aforo y a las medidas de seguridad", ha señalado también que en esta edición, y por las circunstancias especiales de este año, no ha sido posible presentar un nuevo montaje, por lo que se ha recuperado uno de los montajes "más recordados por todos los vallisoletanos".

Así, la composición del Belén Bíblico Monumental de la Diputación recupera la ambientación en Tierra Santa, en concreto en Belén y Aín-Karim, y en el Mar de Galilea, que da nombre al montaje. Ocupa una superficie total de 36 metros cuadrados y cuenta con un estanque que representa el mar con una capacidad de más de 300 litros de agua.

Cuenta con más de 500 figuras, incluyendo los animales y la ornamentación, que representan un total de ocho escenas: la Anunciación a María y calles del mercado de Nazaret; el Mar de Galilea, con el puerto pesquero y muelle construido en madera; la Visitación de María a su prima Isabel en Aín-Karim; la Anunciación a los pastores en el campo; el río Kisson con los acantilados y cascada; el Palacio de Herodes y la Cabalgata de los Reyes Magos; María y José pidiendo posada en Belén; y, por último, el Nacimiento de Jesús en la gruta.

Ricardo Rodríguez González, presidente de la Asociación Belenista Castellana, entidad que viene montando el Belén de la Institución provincial desde 1992, ha afirmado que es "motivo de satisfacción que, a pesar del chaparrón de la pandemia, se haya podido montar este Belén gracias a la disposición de las autoridades aunque ha lamentado que este año no se haya podido hacer "algo novedoso" debido a las circunstancias.

Por su parte, el maestro belenista Jesús Pelayo, responsable del montaje de este año, ha querido hacer un "homenaje a todo el personal sanitario que ha ayudado a llevar mejor este año tan nefasto".

En cuanto al Belén, ha confesado la existencia de algún que otro pecio en el ficticio mar de Galilea que inunda la sala, ejemplo del que se ha valido para exponer las dificultades que ha conllevado el montaje, en el que este año tampoco faltan los ratones "escondidos" para poner a prueba la vista del público.